Nueva York
"El desafío es que pierdes la camaradería de tus colegas", confiesa Jay Heller, el director de mercados de capital del Nasdaq o, mejor dicho, el maestro de ceremonias encargado de orquestar las salidas a bolsa en esta plaza bursátil.
Desde 2012, este directivo ha gestionado más de mil debuts y es de esta forma que revela a este periódico cómo el revés proporcionado por la pandemia del coronavirus no ha congelado por completo los estrenos bursátiles a este lado del Atlántico.
Muy al contrario, Heller ha ejecutado en las últimas semanas más de una docena operaciones públicas de venta (OPV) desde la encimera de su cocina en Old Bridge, Nueva Jersey, a veces bajo la atenta mirada de su gato persa, Barley, otras escoltado por sus dos hijos adolescentes o su mujer, Mindy.
"Desde el punto de vista de la ejecución, para ser sincero, esto es algo para lo que ya habíamos planeado, no pensando en una crisis de salud mundial, sino con la intención de aprovechar nuestra tecnología y poder operarla desde cualquier parte del mundo", destaca al hacer referencia a las OPV virtuales y sus primeros intercambios de acciones en remoto.
Es así como Heller y resto de su equipo en el Nasdaq facilitan las necesidades de aquellas empresas que, pese a la volatilidad generada por el Covid-19, aún buscan recaudar capital en los mercados de EEUU. De hecho, esta modalidad ha potenciado la eficacia de todo el proceso.
Nuevos hábitos
Los conocidos como road shows, donde la compañía en cuestión intenta seducir a los inversores institucionales, se han reducido a la mitad y dista de los ocho días de antaño. Siempre por videoconferencia y respetando el distanciamiento social.
Paralelamente, durante el día clave, la conectividad permite a todo su equipo acceder a la red del Nasdaq de forma directa y su plataforma permite coordinar a los bancos suscriptores elegidos por la compañía en cuestión con los cientos de miles de pedidos de compra y venta de títulos.
"Tienen toda la información en tiempo real y nuestra plataforma es completamente transparente", aclara, reiterando que todo, salvo la localización, es igual a una salida convencional.
De esta forma, solo en el mes de abril, cuando las medidas de confinamiento alcanzaban su punto álgido, el Nasdaq logró llevar a buen puerto las salidas a bolsa de Lyra Therapeutics, ORIC Pharmaceuticals, Keros Therapeutics y Zentalis Pharmaceuticals, que recaudaron un total de 437,2 millones de dólares.
De hecho, estas cuatro biotecnológicas han generado un retorno medio del 67% desde sus estrenos. El viernes 8 de mayo, Heller hizo triplete coordinando las OPV de GAN, Kingsoft Cloud y Ayala Pharmaceuticals, que captaron un total de 619 millones de dólares.
Reabre el parqué neoyorquino
En estos menesteres, el NYSE, más conocido como la Bolsa de Nueva York, que cerró su parqué el pasado 23 de marzo y viró todas sus operaciones a formato electrónico, ha quedado más rezagado.
De hecho fue este jueves cuando lanzó su segunda salida a bolsa en lo que llevamos de mes, SelectQuote, que subió un 35% y captó 570 millones de dólares. Hace una semana acogió el desembarco de ADC Therapeutics, con una recaudación de 233 millones de dólares.
Tras algo más de dos meses sin la presencia física de sus operadores, el parqué neoyorquino reabrirá con extremas limitaciones sus puertas el próximo martes.
Peter Tuchman, agente de bolsa de Quattro Securities y mítico veterano en del NYSE, aclara a elEconomista que durante la ausencia de la mano humana, "no existe la misma transparencia en el punto de ejecución, donde puedes ver dónde se alinean todos los compradores y vendedores".
Tuchman, aún convaleciente por el Covid-19, no formará parte del limitado grupo de brokers que regresen el 26 de mayo, pero sí lo hará su hijo Benny. Aun así, estima que no será hasta la segunda fase de retorno que volveremos a escuchar el jolgorio y "volver a realizar salidas a bolsa de la manera que queramos".
El NYSE también cuenta con la posibilidad de ejecutar sus salidas a bolsa de forma puramente electrónica y remota. Aunque algunas compañías menos afectadas por la coyuntura macro, especialmente las biotecnológicas, avanzan en sus planes para cotizar públicamente, es cierto, que este mercado ha sufrido con la pandemia.
Heller: "A medida que entramos en la segunda mitad de 2020, muchas firmas que estaban pensando en salir a bolsa a principios de año y no lo hicieron han reaunadado las conversaciones nuevamente."
Según datos de la consultora Renaissance Capital, en lo que llevamos de año se han registrado 35 estrenos con una recaudación de 8.800 millones de dólares, un 62,9% menos que el año pasado por estas mismas fecha.
No obstante, entre los meses de abril y mayo, al menos 17 compañías han presentado sus planes ante la Comisión de Mercados y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) para sus futuras OPV.
"A medida que entramos en la segunda mitad de 2020, muchas firmas que estaban pensando en salir a bolsa a principios de año y no lo hicieron han reaunadado las conversaciones nuevamente. Y parece que en junio y julio vamos a estar bastante ocupados", adelanta Heller a menos de 30 minutos del comienzo de una nueva jornada bursátil, que el vicepresidente del Nasdaq seguirá desde la comodidad de su hogar.
El riesgo en las firmas chinas
El Senado aprobó con un voto unánime el miércoles un proyecto de ley que requerirá que las empresas que recauden capital en los mercados de EEUU certifiquen que "no son propiedad ni están controladas por un gobierno extranjero".
Aunque la ley podría aplicarse a cualquier firma extranjera que cumpla con estas condiciones, los legisladores buscan con esta decisión atar en corto a las compañías chinas. Además, se les exigirá que se sometan a una auditoría que pueda ser revisada por la Junta de Supervisión Contable de las Empresas Públicas (PCAOB, por sus siglas en inglés).
