
Las extraordinarias circunstancias que rodean a la crisis del coronavirus han provocado que la visibilidad sobre los resultados empresariales sea más reducida de lo normal y complique las comparaciones. Con los analistas rebajando sus estimaciones a ritmos nunca vistos, entidades como Morgan Stanley apuntan a la mayor contracción de la historia en la bolsa europea en un año natural, con una caída del 45%. Con un 2020 que se da por perdido, la atención del mercado está en la recuperación a partir de 2021, pero lo cierto es que no todos los sectores vuelven a la normalidad al mismo ritmo.
"Aunque el foco para muchos está en buscar los mínimos, nosotros estudiamos el próximo ciclo de beneficios y cuándo se volverá al pico previo. Y mirando la gran crisis financiera no el resultado no permite hacer una extrapolación muy positiva. El mercado en general no logró alcanzar su anterior pico de beneficios y solo lo hizo un tercio de los sectores. En nuestras estimaciones, a finales de 2021 las ganancias estarán un 16% por debajo de los niveles de 2019 y pensamos que estos no se recuperarán en menos de 5 años", apuntan en UBS. En Morgan Stanley calculan que en 2021 el beneficio de la bolsa europea estará un 23% por debajo de su pico y que es "improbable" que la vuelta al nivel de 2019 se produzca antes de 2023.
Por sectores los bienes del hogar, la salud y los productores de comida son los que recuperaron más rápido su pico de beneficios en la gran crisis financiera, tardando entre 2 y 4 meses desde que tocaron su punto más bajo de la recesión. Mientras, las farmacéuticas tardaron 6 meses, la alimentación 9 meses y la bebida y el tabaco hicieron lo propio en solo 11 meses. Sin embargo, que sean capaces de recuperar más velozmente su pico de ganancias no hace por sí mismo una oportunidad de inversión ni necesariamente quiere decir que sean aquellas industrias en las que el inversor puede encontrar más valor.
"La calidad ha funcionado, pero está saturada y es cara. El liderazgo del mercado ha sido de un puñado de compañías e inclinadas al crecimiento y la calidad. Por lo tanto, la parte dolorosa probablemente venga más de una rotación de estilo a risk on más que a otra caída en las bolsas. Esperamos que la recuperación sea desigual, pero somos conscientes de que el espacio de calidad y crecimiento es caro", apuntan desde el equipo de análisis de Barclays.
A pesar de haberse quedado rezagados en la subida, todos los sectores que en la anterior crisis financiera recuperaron más rápido sus ganancias baten al mercado tanto en lo que va de año como desde los máximos y, de hecho, el de la salud logra un retorno ligeramente positivo en el ejercicio.

Esto ha provocado que las cíclicas coticen a nivel global con un descuento de entre el 40% y el 45% en términos de precio sobre valor en libros, en línea con los niveles vistos en el suelo de los dos últimos mercados bajistas. En Citi advierten de que "las valoraciones baratas no evitan que las cíclicas lo hagan peor que las defensivas", pero sí consideran que "pueden ayudar a limitar el daño".
En este sentido, en Bank of America creen que las firmas cíclicas tienen margen para sacar 20 puntos porcentuales a las defensivas de aquí a fin de año y recomiendan sobreponderar los bancos, automovilísticas, bienes de capital y recursos básicos. Eso sí, señalan que los grandes riesgos son una segunda ola de contagios o un aumento del estrés en la financiación de Italia si no hay una coordinación fiscal en la UE.
Los que no se han recuperado
Durante el último ciclo económico Europa ha sido incapaz de recuperar el pico de beneficios marcado previamente a la gran crisis financiera, quedándose un 8% por debajo, según datos de UBS. Y es que casi dos tercios de las industrias fueron incapaces de llegar a su máximo y el peso del sector financiero tuvo gran parte de culpa en esto, con aseguradoras, bancos y financieras diversificadas siendo incapaces de recuperar sus ganancias.
El caso más dramático es el de los bancos, que se quedaron un 58% por debajo de sus máximos de la crisis financiera, pero más preocupante aún es que el pico de la década lo hizo hace casi 9 años, en junio de 2011. Ahora, el sector vuelve a estar en el punto de mira, siendo uno de los más castigados y algunos analistas ven una oportunidad en la industria. "Nuestras proyecciones de recuperación de los PMI y de que la rentabilidad del Bund suba se traducen en un potencial del 20% para los bancos frente a la bolsa europea de cara al tercer trimestre", indican en Bank of America. Eso sí, esta no es una visión que sea común en todo el consenso: "Cotizan a múltiplos deprimidos de valoración y tienen una posición de liquidez y un balance mejor que en 2008 y 2009. Sin embargo, unos tipos mas bajos por más tiempo, el elevado riesgo de crédito y la presión regulatoria para recortar los dividendos probablemente sigan pesando en la industria", avisan en Barclays.
Otro de los grandes sectores que fue incapaz de recuperar sus ganancias más altas es el energético, si bien su peso en la bolsa europea ha disminuido sensiblemente. Las empresas del sector se quedaron un 12% por debajo de su pico y ahora vuelven a estar contra las cuerdas ante el desplome del crudo. "Las integradas vuelven a estar contra la pared, con los breakeven actuales siendo insuficientes. Nosotros recortarmos los precios objetivos el 25% y analizamos sus porfolios para ver la generación de caja con un crudo en 40 dólares. Pensamos que la flexibilidad de los balances y su generación de caja le dan margen 12-18 meses. El primer semestre será duro, pero las valoraciones relativas indican que el sector está sobrevendido", indican los analistas de JP Morgan