Más de dos meses después del inicio de una de las correcciones más rápidas e intensas en las bolsas y una posterior recuperación parcial los inversores y analistas se miran unos a otros en busca de un dedo que señale la dirección que el mercado va a seguir en las próximas semanas. Argumentos no faltan en cada una de las posiciones.
En la trinchera de los que esperan una nueva recaída de las bolsas lo tendrán fácil a medida que los números sitúen esta recesión entre una de las peores de la historia, algo que no termina de ir en consonancia con el repunte que estás protagonizando los principales índices bursátiles de Wall Street, que ya vuelven a estar en máximos del rebote y que deja el balance de pérdidas desde el inicio de esta crisis en un 13,7%. El efecto en el empleo que ya se va reflejando a ambos lados del Atlántico, la consiguiente caída de los consumos domésticos y el retroceso de los beneficios empresariales son otras razones por las que cabe dudar de la sostenibilidad de estos ascensos.
Sin embargo, también hay voces optimistas que se agarran a que con la cercanía de las medidas de desconfinamiento y reanudación de la actividad, el mercado volverá a coger el tono que tenía antes del Covid-19, que no es otro que un Wall Street en máximos históricos y una Europa en máximos de 2008. "La confianza sobre la próxima reapertura de la economía aumenta, mientras que el mercado continúa ignorando la caída del petróleo", explica a este periódico Ken Polcari, estratega jefe de Slatestone Wealth.
Oleada de reaperturas
Polcari hace referencia a la oleada de anuncios se han dado a conocer esta semana en su mayor parte siguiendo las pautas nacionales para un reinicio de la actividad por fases con al menos dos semanas de separación entre ellas. El gobernador de Texas, Gregg Abbott, anunció el lunes que su orden de confinamiento expirará el 30 de abril. Para entonces, todas las empresas podrán abrir al 25% de su capacidad, aumentando al 50% el 18 de mayo si las infecciones continúan disminuyendo.
Algunos estados del sudeste del país se están moviendo más rápido, ya que Georgia, por ejemplo, ya abrió algunos restaurantes el lunes 27 de abril. El noreste y la costa oeste tienen plazos más largos. Sin embargo, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, su homólogo en California, Gavin Newsom y el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy sugirieron que pasarían "semanas", no meses, antes de que veamos una relajación más significativa de estas medidas.
"El mercado está mirando hacia el futuro y está negociando lo que cree que sucederá dentro de 4 o 6 meses y parece que le gusta lo que ve", asegura el estratega de Slatestone Wealth que estima eso sí que las próximas 4 a 6 semanas serán cruciales para "darnos cuenta de cuál será la nueva normalidad".
Desde su punto de vista, el motor que está impulsado al mercado tiene que ver con el reinicio y la recuperación de la economía, algo que puede apreciarse en los sectores que lideran el reciente rebote, buena parte de ellos cíclicos liderados por el industrial, el de materiales y el financiero.
Un reflejo de esta cierta tranquilidad que impera en las últimas fechas es la volatilidad, que ha vuelto a normalizarse relativamente. El índice Vix marcó máximos históricos por encima de los 80 puntos el pasado 16 de marzo y, desde entonces, se ha relajado hasta los 32 puntos que registró en la jornada del martes, mínimos de la primera semana de marzo.
Desde el punto de vista técnico, Joan Cabrero, asesor de estrategia de Ecotrader, apunta que "las alzas de corto plazo no hacen más que reforzar los mínimos de la semana pasada como la línea divisoria que separa una continuidad del rebote de la conclusión del mismo, dependiendo de si se mantienen en pie o se pierde, respectivamente". "Hablamos de soportes como son los 2.727 puntos [de los que están a más de un 6% de caída] del S&P 500, los 22.940 del Dow Jones y los 8.332 del Nasdaq 100", añade Cabrero. Así, "mientras estos soportes no se pierdan el rebote de las últimas semanas seguirá vivo y no podremos descartar que haya una continuidad dentro del mismo, si bien es cierto que para favorecer mayores alzas esperamos que el Nasdaq Composite logre superar resistencias de los 8.750 puntos, lo que abriría la puerta a posibles alzas adicionales del 5%", concluye el experto.

En el Viejo Continente, el panorama es algo menos optimista por la distinta evolución de la pandemia entre los distintos territorios y las dificultades para llegar a acuerdos en el seno de la Unión Europea. Esto se ha reflejado también en las bolsas, que han perdido 9 puntos más que Wall Street desde el inicio de esta crisis, hace algo más de dos meses. "EEUU se ha comportado mejor durante esta crisis gracias a su mayor exposición a sectores como la tecnología (25%), la atención sanitaria (15%) y las telecomunicaciones (10%)", explican desde Bank Degroof Petercam. Desde la gestora SYZ también analizan el momento de mercado por "la velocidad sin precedentes a la que los activos de acciones y deuda se han ajustado en estas semanas. (...) Dado que el mercado ya ha pasado una parte importante del shock negativo, no es necesario mantener un posicionamiento excesivamente cauteloso en las carteras y se puede reducir el alto grado de infraponderación en bolsa incluso en los perfiles más defensivos", añaden.
Las lecturas que se pueden ir haciendo ya de la temporada de resultados del primer trimestre en Wall Street son muchas después de que 133 de las 500 compañías del S&P 500 hayan anunciado sus cuentas de los primeros tres meses del año, es decir, más de una cuarta parte del total. Tras estos primeros resultados, los beneficios reportados se han quedado un 4% por debajo de las previsiones del consenso de analistas que recoge Bloomberg, sin embargo, no eran pocos los expertos que señalaban a un descalabro incluso peor del 17% de caída de las ganancias que de momento se están registrando si lo comparamos con el primer trimestre del año pasado. "Los sectores más afectados son energía, banca y manufactura y nos está llamando la atención ver que muchas compañías, de diversos sectores, hayan decidido no hacer comentarios sobre las previsiones de sus resultados de los próximos trimestres citando las incertidumbres del Covid", explican los expertos de Bank Degroof Petercam.