Clorox, uno de los grandes fabricantes de productos de consumo no duraderos en Estados Unidos, como los desinfectantes del mismo nombre o los productos de cosmética Burt's Bees, gana algo más de un 30% en bolsa en lo que va de año. Sí, un 30%, a pesar del desplome que ha provocado la crisis del coronavirus. ¿Acaso los geles de baño, los dentífricos o los friegasuelos son inmunes a esta crisis?
Lo que sí se puede afirmar es que la caída de la industria de los productos del hogar en bolsa ha sido mucho más ligera en su conjunto que la caída del mercado. De media, las acciones de los mayores representantes del sector han experimentado un descenso del 8,6% en 2020 frente al 31% que pierde el Stoxx 600 o el 25% que se ha hundido el S&P 500.
Clorox es el ejemplo más destacado. Además, es de todas la compañía que más ha visto aumentar su capitalización bursátil en lo que va de año, en concreto, ha ganado en torno a 5.150 millones de euros, hasta superar los 22.000 millones.
Pero lo más curioso de todo es que los títulos de la firma americana registraron un máximo histórico en los 197 dólares el 17 de marzo, mientras todo parecía derrumbarse a su alrededor.
Clorox sería una de esas empresas "que son inmunes o incluso les ayuda esta situación", como explicó hace unos días a este periódico José Antonio Madrigal, bróker y director de Eurekers, compañía que ofrece cursos de inversión en bolsa.
Madrigal destacaba a los fabricantes y distribuidores de productos domésticos entre los sectores más fuertes en el escenario actual, junto a las tecnologías de la salud, los servicios públicos y las finanzas.
Asimismo, Clorox sería una de las empresas que estaría presionando al Gobierno de Donald Trump por medio de lobbies y asociaciones de consumidores, para que los supermercados y otras superficies comerciales queden exentos de los toques de queda y la prohibición de que grupos de personas se reúnan en un mismo lugar. Pretenden evitar la escasez de alimentos en los mercados y para ello necesitan que tanto transportistas como demás trabajadores puedan moverse con libertad, señalan desde Bloomberg.
Colgate-Palmolive es otra de las empresas que cotizan en positivo en el parqué. El conglomerado, conocido por la pasta dentífrica y otras marcas como Sanex, Ajax y Brite, sube alrededor de un 4,2% en bolsa, a cierre del miércoles, y es la segunda gran firma del sector que más aumenta su tamaño en bolsa: casi 2.100 millones de euros en lo que va de año.
Sin embargo, en este caso, la acción se ha deslizado un 13% desde el máximo histórico que marcó a mediados de febrero sobre los 76 dólares.
También al alza cotizan Unicharm, fabricante japonés de artículos de higiene personal y de mascotas, que sube en bolsa algo más de un 3% en los primeros meses del año, y el estadounidense Church & Dwight, cuya rentabilidad anual está ligeramente por encima del 2%.
Además, Unicharm ha visto aumentar su valor bursátil en casi 600 millones de euros en lo que va de ejercicio, la acción está a un 8% de máximos, carece de deuda y recibe una de las pocas recomendaciones de comprar en el sector, junto a LG Household & Health Care, Kao, Hindustan Unilever Limited y la propia Unilever.
Unicharm no es la única firma de esta industria que puede presumir de caja. También es el caso de Hindustan Unilever, L'Oréal, Kao y LG Household. Sin embargo, la que más destaca en esto es la alemana Beiersdorf, más conocida por sus marcas Nivea o Eucerin.
"El coronavirus podría borrar todo el crecimiento (4,5% en 2019) del sector de la belleza, el hogar y el cuidado personal, incluso frente a la demanda creciente de productos de lavandería y limpieza personal y de superficies", sostiene Deborah Aitken, de Bloomberg Intelligece.
"El uso de más limpiadores compensa el descenso del volumen en maquillaje y fragancias por los cierres de tiendas, junto con las menores visitas a tiendas, spas y peluquerías. El cuidado del hogar, con un valor de 159.000 millones de dólares, está en tercer lugar por detrás de los productos de belleza y el cuidado personal", subraya la experta.
¿Qué compañías moderan las caídas?
Frente al derrumbe que experimentan otras compañías relacionadas con el consumo y el turismo, una buena parte de los fabricantes de productos del hogar contiene la presión vendedora y atenúan los descensos en el parqué.
Procter & Gamble, dueño de Ariel, Tampax, Gillette o H&S, sólo pierde alrededor de un 3% en bolsa en lo que va de año. Kimberly-Clark, fabricante del papel higiénico Scottex y de los pañuelos Kleenex, modera su descenso en el año al entorno del 3,6%; Unilever pierde un 4,6%; Kao, cerca de un 5,5% y Reckitt Benckiser, propietario de marcas como Calgon, Durex y Strepsils, registra una caída del 7%.
Si bien pueden parecer descensos considerables, palidecen en comparación con el 26% que se ha desplomado en bolsa la alemana Henkel (Cucal, Denivit, Diadermine, Dixan); el 18% de LG Household o el 16% de Beiersdorf.