
El escenario al que se enfrentan las compañías del sector hotelero se ha complicado un poco más tras la quiebra de Thomas Cook el pasado 24 de septiembre. La coyuntura que deben asumir las firmas que lo componen ha encontrado otro escollo, tras el Brexit y la desaceleración económica.
En este contexto, las recomendaciones que los analistas hacen sobre estas empresas se han deteriorado, aunque solo en algunos casos.
Según el consenso de mercado recogido por FactSet, desde enero la recomendación de compra de Meliá ha ido desgastándose hasta el punto de que, según este algoritmo del consenso, el consejo ya es mantener. Una tendencia que se contrapone a la de NH, cuyos títulos reciben cada vez más apoyo de parte de los expertos que la siguen, quienes recomiendan comprar. Según recogen desde Bloomberg, desde hace más de un año la compañía no recibía tantos consejos de compra.
Una de las últimas casas de inversión en corroborar esta tendencia ha sido Deutsche Bank. Los analistas de la firma alemana han reiniciado recientemente la cobertura sobre seis compañías cotizadas de en el mercado de renta variable continental de este ámbito, entre las que se encuentran las españolas NH y Meliá. Y las diferencias han sido palpables. Desde la entidad teutona consideran que las acciones de NH tienen ahora más atractivo que las de Meliá. La firma dirigida por Ramón Aragonés se convierte en una de las compañías preferidas para los expertos germanos –junto a Accor–, y se cobra ventaja frente a una de sus principales comparables en España, Meliá, que, sin embargo, solo recibe un consejo de "mantener en cartera".
"El grupo está en pleno proceso de desapalancamiento y se ha beneficiado de unos ingresos por habitación disponibles muy favorables en la mayoría de sus mercados", aseguran desde la entidad alemana, desde donde hacen hincapié en su atractiva valoración.
Falta de liquidez
En contraposición a las preferencias de los analistas, sin embargo, hay que tener en cuenta que a pesar de las buenas recomendaciones, la liquidez juega en contra de las acciones de NH.
El free float de la compañía –la parte del capital de una empresa que cotiza libremente en bolsa– es muy reducida en la empresa comandada por Ramón Aragonés. Las acciones que se encuentran en circulación y pueden ser compradas por los inversores o vendidas por los accionistas libremente son muy pocas, lo que puede provocar dificultades a la hora de intentar deshacerse de sus títulos en el mercado.
De hecho, el volumen negociado por Meliá es, de media, 30 veces superior al de NH en los últimos seis meses según los datos recogidos desde Bloomberg. Algo que se explica tras la opa de Minor a esta última el año pasado.
"Minor posee el 94% del grupo, lo que no tiene sentido a largo plazo", aseguran desde Deutsche Bank. "Por eso", continúan desde la entidad, "anticipamos una oferta completa por las acciones restantes [la última se realizó a 6,3 euros hace un año] o una colocación privada, si Minor desea mantener a NH cotizando". El jueves, los títulos de la hotelera española cerraron en los 4,45 euros.
Accor también tiene un consejo de compra
La recomendación de compra de NH se ha convertido en un 'rara avis' en el sector hotelero europeo, donde cada vez menos compañías lucen un consejo de compra. "En general, consideramos que el ciclo en Europa está cerca de su pico y es probable que se desacelere o incluso comience una recesión en algunos destinos", afirman desde el departamento de análisis de Deutsche Bank.
En este sentido, el consenso de mercado recogido desde FactSet, ya solo ve una oportunidad para tomar posiciones en la compañía española y en la firma gala Accor.