Si los rebeldes hutíes pretendían hacer daño a Arabia Saudí, han elegido un buen momento para atacar las instalaciones petrolíferas de Aramco, ya que el reino árabe está en pleno proceso de acelerar la salida a bolsa de la compañía, la mayor petrolera del mundo.
Las dudas respecto a la valoración que tendrá la compañía cuando salga al mercado a cotizar llevan ya varios años rondando a los mercados. Mientras Arabia defiende que Aramco vale 2 billones de dólares, son muchos los expertos que consideran exagerada esa cifra. Desde Bloomberg Intelligence apuntaban más hacia los 1,5 billones de dólares. Si se compara el beneficio de Aramco del año pasado, de 111.100 millones de dólares en el ejercicio, y se pone en relación al multiplicador de beneficios (de 12,6 veces) con el que cotizan actualmente las 10 mayores petroleras del mundo, la valoración de Aramco rondaría los 1,4 billones de dólares.
Desde Qamar Energy, una consultora energética con sede en Dubai, apuntan a una valoración similar, ya que explican a la agencia que "valorando Aramco de forma similar a Shell o ExxonMobil la valoración estaría entre los 1,2 y los 1,4 billones de dólares", explican, y avisan de que "será imposible continuar con la salida a bolsa si continúa habiendo ataques".
Otros expertos avisan de que el ataque va a obligar a los inversores a reevaluar sus modelos de riesgo para la compañía, por lo que los análisis que pudieran haber hecho en los últimos meses sobre la operación se habrían ido al traste. Se trataría de un nuevo retraso en la operación, que en un principio estaba planificada para que tuviese lugar en 2008.
Según se explica desde Bloomberg, los representantes de los bancos contratados por Aramco para llevar a cabo la operación estaban en plena reunión, en el Hotel Ritz de Dubai, cuando se produjo el ataque a las instalaciones de la petrolera saudí.