
A falta de una sola sesión para cerrar el primer trimestre del año, el balance arrojado por las bolsas ha sido mucho más positivo de lo esperado al cierre de 2018, pero también es probable que pocos estuviesen satisfechos con el comportamiento de Europa desde el arranque del pasado año. Las subidas de doble dígito del EuroStoxx 50 han borrado gran parte de los números rojos cosechados en 2018, pero aún faltaría un ascenso adicional del 5,5% para recuperar todo lo perdido el anterior ejercicio.
En concreto, el índice de la eurozona se anota una subida del 10,6%, hasta la zona de los 3.320 puntos, y aún tiene un recorrido del 5,5% hasta los 3.504 puntos en los que arrancó 2018. Por su parte, el Ibex 35 se ha quedado rezagado una vez más y la subida del 7,4% que lleva en este año aún le deja a más del 9% de los 10.044 puntos en los que inició el pasado año. Para aquel que entrase en los altos de 2018 la situación es aún más complicada, ya que el selectivo se queda a un alza del 12% de recuperar lo perdido durante el periodo.
Muy distinta es la situación al otro lado del Atlántico. El S&P se anota un ascenso de casi el 14% en lo que va de año, se sitúa un 5% por encima del precio en el que inició 2018 y apenas necesitaría un alza del 4,3% para volver a tocar máximos históricos. En el caso del Nasdaq 100 la revalorización en el primer trimestre del año alcanza el 16%. Aquel que invirtiese en el índice tecnológico al arrancar 2018 ganaría ahora un 14% y se queda apenas un 4,4% por debajo de los máximos históricos.
A nivel técnico, Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, recomienda vigilar los soportes que se encuentran en los 9.100 puntos en el Ibex, en los 3.270 puntos en el EuroStoxx 50 o los 2.750 puntos en el S&P 500. "La cesión de soportes en Europa sería de todo menos algo alcista para la renta variable de la región y advertiría de que muy probablemente estemos ante el proceso de corrección del rebote de las últimas semanas y que nació en los mínimos de Navidad, que es la corrección que insistentemente hemos venido señalado que hay que esperar antes de plantearse tomar nuevas posiciones en bolsa europea", señala Cabrero.

Por sectores, el retail europeo es el más alcista del continente con un avance del 19%, seguidos de alimentación y los recursos básicos, que suben cerca de un 18%. Una situación que contrasta con la de las telecos, que sólo avanzan un 2%, penalizadas por el temor de los inversores a la fuerte inversión necesaria para adaptarse al 5G y el freno en las fusiones.
En el parqué español, Siemens Gamesa y Acciona se anotan las mayores alzas del Ibex con un repunte del 35%, seguidas de Mediaset, Cellnex y Aena, que avanzan más de un 20%. Por el lado contrario, IAG y Sabadell retroceden un 13%.
En renta fija también se imponen las compras. El bono alemán continúa en territorio negativo –en el -0,07%– después de que su interés haya caído en 31 puntos básicos en el trimestre, y el interés del bono español se sitúa en el 1,09%, 33 puntos básicos por debajo del inicio del año.
Sin buenas noticias
Si a nivel técnico desde Ecotrader recomiendan mirar a los soportes, a nivel fundamental las perspectivas no son especialmente halagüeñas. Europa cotiza con un descuento de apenas un 4% frente a su media histórica –al comprarse a 13,2 veces sus beneficios a 12 meses– y por la americana se paga ya una prima del 5% –su multiplicador de ganancias se sitúa en las 16,3 veces–.
"Las bolsas están en su precio justo en el mejor de los casos y se enfrentan a riesgos binarios. Nuestro caso base es que los beneficios están entrando en un terreno más resbaladizo que en 2016 y que una rápida recuperación es improbable", inciden en Barclays.
Y es que a las subidas de las bolsas se han sumado los recortes en las perspectivas de ganancias –caen el 3% en EEUU y el 2,5% en Europa–, lo que deja unas expectativas de aumento del beneficio bastante limitadas, con un 4% para el S&P 500 y un 6% para el Viejo Continente. "La caída en las previsiones de beneficios se debe principalmente a la ralentización de las economías que no son de EEUU. De hecho, en 2018 se produjo una descorrelación significativa en el crecimiento mundial y las expectativas de aumento del PIB han caído más en el resto del mundo que en Estados Unidos", explican en el banco británico.