
Renta Corporación invertirá más de 30 millones de euros este año en la compra y adecuación de locales comerciales de zonas urbanas secundarias para convertirlos en trasteros y alquilarlos. La inmobiliaria, que ya ha comprado dos espacios en Barcelona, buscará locales de más de 300 metros cuadrados en la capital catalana y en Madrid, así como en otras ciudades españolas de más de 100.000 habitantes, e incluso contempla dar el salto al extranjero más adelante, ha explicado el presidente de Renta Corporación, Luis Hernández de Cabanyes, tras la junta de accionistas anual.
El primer local adquirido está ubicado en el barrio de Horta de Barcelona, tiene una superficie de 3.000 metros cuadrados y estará operativo "en cuatro o cinco meses". Renta Corporación ya tiene otros tres espacios firmados y una veintena en negociación, y destaca el valor de este segmento de negocio por la recurrencia de ingresos que aporta.
La apuesta por los trasteros se suma a la prioridad actual de crecimiento en vivienda (a través de la socimi Vivenio y de promociones sostenibles) y logística, con lo que la compañía prevé casi duplicar el beneficio este año respecto a 2021, con una estimación de 12,6 millones para 2022, frente a los 6,9 millones de 2021, una vez superadas las pérdidas registradas en 2020 por la pandemia.
La mejora del negocio también se traduce en la retribución al accionista: la junta de accionistas ha aprobado este miércoles el reparto este mes de un dividendo complementario de 2,2 millones de euros que se sumará al dividendo a cuenta de 1,2 millones pagado en noviembre, lo que suma un total de 3,4 millones con cargo al ejercicio 2021 y un pay out del 37% o 49% (según si se tiene en cuenta o no el beneficio extraordinario de 2,3 millones logrado por la venta de una parte de la participación en Vivenio en 2021), en línea con la estrategia de la empresa de repartir entre el 40% y el 50% del beneficio.
Respecto a la socimi Vivenio, este 2022 prevé acelerar la materialización de inversiones gracias a la inyección de 800 millones de euros conseguida con la entrada del fondo de pensiones australiano Aware en el accionariado. Este importe está calendarizado en tres años, pero "si hay más oportunidades, no será un freno".