Los precios de las exportaciones subieron un 0,8% en el mes de enero y los de importación subieron un 1% en el mismo mes.
A pesar de que el aumento de los precios de importación fue impulsado por el petróleo, los precios aumentaron para una variedad de productos tales como automóviles alemanes, queso francés y vino italiano.
Ambos indicadores subieron más de lo previsto y van en línea con el alza de la inflación que se registró en el mes de enero en el país, tanto en el consumo como en producción. Este datos adquiere especial relevancia, en un momento en el que el mercado ha empezado a temer que los precios se disparen y la Reserva Federal se vea obligada a subir los tipos más veces de la previstas.
La inflación de enero se situó en el 2,1%, una décima por encima del objetivo de estabilidad del banco central. Tras publicarse el dato, los futuros de EEUU han respondido con descensos y entran en terreno negativo, complicando la sesión del viernes para las bolsas europeas y para la apertura.