Evasión

Por qué es importante cocer la patata con agua fría (y no deberías saltarte este paso): se protege la estructura de la patata

iStock

Todo el mundo puede cocinar, aunque el resultado obtenido variará mucho dependiendo de las ganas que se le ponga y de los conocimientos culinarios. Por eso es importante dedicar un tiempo a comprender las recetas y sus procesos, para aplicarlas en otras cosas y poder mejorar. No basta con echar sal agua de los huevos o echar la pasta cuando ya esté hirviendo porque es lo que siempre se ha hecho.

Hacer pasta es tarea fácil: pones agua a hervir y cuando ya esté la echas para cocinarlos bien. Esto hace que se cocine de forma regular y no se libere el almidón. Cabría pensar lo mismo para otro tipo de carbohidratos, pero lo cierto que con la patata este truco no funciona.

El proceso de la patata cocida

Se pelan las patatas y se lavan una vez. Luego se ponen en el agua fría y se ponen al fuego. Cuando comiencen a hervir se cuentan ocho minutos y se sacan. No hay más.

Es importante seguir estos pasos para que el calor penetre poco a poco y se cuezan de manera uniforme de dentro hacia afuera. Con esta técnica conseguirás las mejores patatas cocidas para luego hacer todo tipo de recetas, como bravas, puré o hasta para hacer pastelitos de patatas y queso gratinado.

Más detalles

Sin embargo, para que el resultado sea todavía mejor puedes añadirle un chorro de vinagre de manzana antes de ponerlas al fuego. Esto hará que se proteja la estructura de la patata, ya que esto subirá el pH del agua y se formará una película alrededor de la patata con la que se conservará lo más entera posible.

Propiedades de la patata cocida

La patata cocida contribuye al fortalecimiento del sistema inmunológico, ya que es rica en vitamina C. Además, es una excelente fuente de potasio, un mineral esencial que ayuda a regular la presión arterial.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky