
El grupo inversor Atitlan y la promotora de energías renovables EiDF negocian un acuerdo por el que la compañía valenciana inyectaría 38 millones de euros para financiar la construcción de plantas fotovoltaicas del grupo energético gallego, que ha sufrido en los últimos meses un momento convulso tras los retrasos en la publicación de su auditoría.
Según ha comunicado EiDF al BME Growth en el que cotiza, la empresa ha firmado una carta de intenciones para iniciar las negociaciones para un acuerdo de inversión con Atitlan, que está controlada y dirigida por Roberto Centeno, yerno del presidente de Mercadona, Juan Roig, junto a Aritza Rodero.
El acuerdo supondría que Atitlan aportaría hasta un total de 38 millones de euros para financiar proyectos de construcción y explotación de diversas plantas de energía solar fotovoltaica de la cartera del grupo promotor de origen gallego, que sumarían una capacidad en total de 79,26 MW.
Para materializar la operación se contempla la posibilidad de crear una nueva sociedad en la que Atitlan ostentaría el 51% del capital social y EiDF el 49% restante, que en su caso cubriría mediante la aportación no dineraria de proyectos actualmente desarrollados en distintas sociedades creadas específicamente para cada proyecto.
Ambas partes se han marcado hasta el 31 de diciembre de 2023 como plazo para cerrar este acuerdo, que según EiDF estará supeditada entre otros elementos a los términos y condiciones pendientes de ser concretados y formalizados y a la realización de la Due Dilligence correspondiente por parte de Atitlan, y de la aprobación definitiva.
Inversión en 400 MW
Precisamente la inversión en renovables es uno de los campos en que Atitlan se había marcado para diversificar sus inversiones y el grupo inversor de Centeno y Rodero ya está participando en varios proyectos de nuevas plantas a través de Atitlan Helios, que ya tiene en fase avanzadas varias plantas solares en Alicante.
Así, sus planes son que las primeras plantas fotovoltaicas entrarán en operación en 2024. Actualmente cuenta con 400 MW en la fase previa a las obras y una cartera de proyectos que suman 3GW e incluyen plantas en Chile, Colombia, Perú, Italia o Canadá.