
Iberdrola ayudará a entregar energía eólica marina renovable desde la red eléctrica de Long Island a la ciudad de Nueva York y al condado de Westchester. La compañía agregará aproximadamente 150 kilómetros de nuevas líneas de transmisión de alto voltaje que recorrerán la distancia bajo tierra y por debajo del agua.
El proyecto fortalecerá la columna vertebral del sistema eléctrico de Long Island y mejorará la resiliencia de la red, además de ayudar a entregar energía limpia libre de carbono en todo el estado de Nueva York. La iniciativa agregará flexibilidad a la red al mismo tiempo que apoya la creación de empleo ligado a las energías renovables y respalda el desarrollo de la industria eólica marina de Nueva York.
Los objetivos de transición energética del estado se encuentran entre los más ambiciosos de la nación. La Ley de Liderazgo Climático y Protección Comunitaria de Nueva York exige la adquisición de 9.000 megavatios de energía eólica marina para 2035.
Una parte significativa de esa generación eólica marina se conectará a la red eléctrica de Long Island, pero para poder suministrar energía limpia y local al resto de consumidores del estado se necesitan conexiones adicionales a la red.
El proyecto será desarrollado por Iberdrola, a través de Avangrid, junto a Edison Transmission, National Grid Ventures y Central Hudson Electric Transmission.
La compañía ha recibido ya el visto bueno de la Comisión de Servicios Públicos de este estado para poner en marcha un proyecto que constará de dos fases y que supondrá destinar 3.663 millones de dólares (3.315 millones de euros) para reforzar los tendidos de la zona y darle cabida -sólo en la zona de la eléctrica- a cerca de 4.252 MW de nuevas energías limpias.
En la primera fase del proyecto, Avangrid cuenta con 13 inversiones que la compañía ha presupuestado en 1.413 millones de dólares (1.278 millones de euros) en las zonas de Lockport, Lancaster, Ithaca, Oneonta y Binghamton.
Según los cálculos de la empresa, estas mejoras que irán entrando en servicio desde 2026 a 2030 permitirán una integración de 2.252 MW de renovables en el sistema eléctrico de Nueva York en la primera fase.
Asimismo, el pasado 16 de febrero, la NYPSC emitió también una orden para autorizar la llamada Fase 2 que consistirá en añadir un total de 62 mejoras en las redes de transmisión para apoyar nuevas fuentes de generación renovable de conformidad con la aplicación de la Ley de Crecimiento Renovable Acelerado y Beneficio Comunitario.
La Comisión de Servicios Públicos de Nueva York ha autorizado una inversión total de 4.400 millones que permitirá integrar otros 3.500 MW de renovables, lo que facilitará el acceso a una energía equivalente al consumo de 2,8 millones de hogares. La empresa reforzará los tendidos para poder incorporar 4.252 MW de nuevas renovables
Iberdrola, a través de sus filiales NYSEG y RG&E, ha recibido el visto bueno en esta segunda fase para una inversión de 2.250 millones de dólares (2.036 millones de euros), es decir, más de la mitad del presupuesto de este desarrollo que incluye también a empresas como National Grid o Central Hudson Gas & Electric Corporation (Fortis Company).
La medida permitirá a la compañía, entre otras cosas, la instalación de 1,9 millones de contadores digitales, además de otras actuaciones en la red de subestaciones de la compañía. La Ley de Crecimiento Renovable Acelerado y Beneficio Comunitario exige que el 70% de la electricidad del estado de Nueva York proceda de fuentes de energía renovables para 2030 y de energía libre de emisiones para 2040.
Nueva York invertirá en energía limpia más de 35.000 millones de dólares en 120 proyectos renovables y de transmisión a gran escala con el objetivo de facilitar una rebaja de las facturas a los clientes.
Avangrid es la tercera mayor empresa de energías renovables del país por capacidad instalada y lidera el desarrollo de la energía eólica marina, un vector fundamental de la transición energética, con una cartera de más de 6.000 MW. Entre sus proyectos en desarrollo destaca Vineyard Wind, en aguas de Massachusetts, que con 806 MW de capacidad es el mayor parque eólico marino a escala comercial del país, y la adquisición de PNM Resources, en Nuevo México y Texas.