Prolongar el descuento del Gobierno de 20 céntimos a los carburantes durante un año pondría en peligro la ansiada independencia energética. Según la organización Transport & Environment (T&E), España incrementaría el consumo de carburantes en 2,1 megatoneladas equivalentes de petróleo (Mtoe), un aumento del 4,5%, frente a un escenario que no contempla esta medida.
Y es que con el periodo actual de duración de la bonificación del Gobierno -del 1 de abril hasta el 30 de junio de 2022- España consumirá 0,69 megatoneladas equivalentes de petróleo adicionales, frente a las 2,78 megatoneladas equivalentes de petróleo que consumiría si se mantuviese vigente un año.
Los países europeos le están dando al presidente Vladímir Putin 285 millones de dólares al día para satisfacer su dependencia del petróleo importado, según un análisis de T&E. Datos de Eurostat, revelan que el 65,03% del consumo de petróleo en Europa se destina al transporte. En este sentido, aumentar el consumo de este carburante sería contradictorio si se quieren cortar los vínculos con Rusia.
Para lograr los objetivos del plan REPowerEU de la Comisión Europea, que busca que Europa se independice de los combustibles rusos, es necesario la puesta en marcha de medidas de ahorro, sensibilización social y consumo responsable en todos los ámbitos. Es fundamental la promoción de la electrificación del transporte por carretera, la revisión de los estándares europeos de CO2 para coches y furgonetas, la revisión de los impuestos aplicables a la automoción, así como la suspensión inmediata de los biocombustibles basados en cultivos.
En una convocatoria de prensa sobre el transporte y el petróleo en lo referente la crisis en Ucrania, Carlos Calvo Ambel, senior director de T&E, ha profundizado en medidas a corto, medio y largo plazo .
Entre las medidas a corto plazo (que dependerán de los gobiernos nacionales, autonómicos, la acción individual y corporativa) destaca el establecimiento de días sin coches (como podrían ser los domingos), el fomento del teletrabajo para evitar desplazamientos, la reducción de los viajes de empresa, la no prolongación de las rebajas impositivas y la reducción de los límites de velocidad.
T&E recomienda, para esta última cuestión, mantener los límites de velocidad actuales para los coches 0 emisiones (en 120 km/hora), reducir el límite actual en 10 km/hora en el caso de los coches con etiqueta ECO y etiqueta (de 120 a 110 km/hora) y hasta 20 km/hora para los vehículos con etiqueta B o sin etiqueta (de 120 km/hora a 100 km/hora).
Las medidas a medio plazo, además de depender de los gobiernos nacionales, autonómicos y municipales, también implicarán a la Unión Europea. En este punto contempla objetivos ambiciosos como parte de FitFor55 (para todos los modos de transporte), objetivos para flotas, eficiencia energética para buques, zonas sin emisiones en zonas urbanas. La clave para descarbonizar el transporte es que el reglamento de infraestructuras de recarga (AFIR) acompañe la transición, junto con combustibles sostenibles para la aviación y el sector marítimo.
Asimismo, a largo plazo las medidas dependerán de los gobiernos nacionales y la UE. En este punto, la clave está en terminar la venta de vehículos de combustión (turismos, furgonetas y camiones) en 2035, tal y como a fijado la UE. Según ha explicado Calvo Ambel, lo ideal sería adelantar esta fecha al 2030.