Madrid
Las constructoras españolas han incrementado sus opciones para construir y operar la primera línea de metro de Bogotá (Colombia) después de que las autoridades hayan dejado fuera del concurso al consorcio liderado por China Railway Group.
De esta forma, de los siete consorcios inicialmente interesados en el proyecto, valorado en más de 6.000 millones de euros, quedan seis, de los que cuatro de ellos cuentan con presencia española. FCC, Acciona, OHL y Sacyr lideran cuatro de las alianzas que están en liza en una licitación que se prevé adjudicar en septiembre.
FCC concurre a través de su división de concesiones. La compañía que controla Carlos Slim con Carso, propiedad igualmente del multimillonario, y con la también mexicana Promotora Ideal. Mientras, Acciona, a través de su filial de construcción, ha formado equipo con las italianas Impregilo y Ansaldo, para la construcción,e Hitachi Rail Italy, como fabricante del material rodante. Un tercer consorcio está encabezado por Sacyr Concesiones Colombia, el fabricante vasco CAF, la coreana Hyundai Engineering & Construction y STOA S. A. R.
La compañía que preside Manuel Manrique ha resultado adjudicataria en los últimos años de importantes contratos en los suburbanos de Sao Paulo y Fortaleza, en Brasil. Por su parte, OHL ha unido fuerzas con las brasileñas Andrade Gutiérrez Engenhaira, Camargo Correa y Companhia de Concessões Rodoviárias (CCR).
En la carrera se mantienen otros dos consorcios formados por la mexicana ICA y su filial Conoisa, Power China, la alemana Siemens y la holandesa Strukton, por un lado, y China Harbour Engineering y Xi'an Metro Company, por otro.
La primera línea del metro de Bogotá tendrá una longitud de 23,96 kilómetros. El contrato contempla la construcción y la explotación durante 20 años.
