El fondo de inversión estadounidense Goldman Sachs rebajó de forma drástica su presencia en Dia el pasado viernes, el mismo día en el que su principal accionista, Mikhail Fridman, recuperó el 14% que tenía prestado en acciones. El banco de inversión estadounidense se desprendió entonces de casi todos los derechos de voto que tenía a través de instrumentos financieros en la cadena de supermercados y al vender más del 4,5% de las acciones que controlaba en la compañía, aunque la notificación oficial a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no se ha producido hasta este jueves.
Aquel día, el pasado 19 de octubre, los inversores bajistas se dieron un auténtico empacho de ganancias al llevar a Dia a desplomarse hasta un 24% al cierre de la sesión. Aquella sesión, Goldman pasó de controlar el 15,9% -con un 11,7% a través de instrumentos financieros- a tan sólo el 1,8%.
En concreto, se desprendió de un 4,5% de acciones, pasando, así, de mantener a través de votos atribuidos a los títulos un 6,4% en Dia al 1,8%, al mismo tiempo que se deshizo de prácticamente todos los derivados financieros que tenía, que ascendían al 9,48%, a quedarse con tan solo el 0,045% de los mismos.
De esta forma, el fondo cuenta con un total de 11,3 millones de acciones en la cadena de supermercados, lo que, a precios de mercado, equivale a 8,4 millones de euros, algo que contrasta con la última notificación a la CNMV del pasado 18 de octubre cuando contaba con 40 millones de acciones, que, a precios de mercado de esa sesión equivalía a 34,8 millones de euros.
Esta salida de Goldman coincide con la venta del fondo soberano noruego, Norges Bank
Esta salida de Goldman coincide con la venta del fondo soberano noruego, Norges Bank, el pasado miércoles, de casi todas sus acciones directas en Dia, pasando del 5,2% que controlaba antes del 'profit warning' que la compañía anuncio el día 15 al actual 2,6%, del cual casi todo es través de instrumentos financieros.
Además, el jueves, Unidos Podemos pidió al presidente de la CNMV, Sebastián Albella, que dé explicaciones en el Congreso por no haber suspendido en los últimos días las operaciones en corto contra la cadena de supermercados Dia, unas posiciones que los grandes fondos ya están deshaciendo.
Con este escenario, el mercado sigue pendiente de los movimientos del fondo Letterone Investment, participado por el millonario ruso Mikhail Fridman, con una participación del 29,001%, a un paso del umbral del 30% que, según establece la actual legislación del mercado, obliga a lanzar una oferta pública de adquisición (OPA) de acciones sobre el 100% de la compañía.
Caída de bajistas
Desde que Mikhail Fridman tomara de manera directa el 29% de su participación el pasado viernes 19, los inversores que apuestan a la baja en Dia han ido desapareciendo paulatinamente. Letterone, su vehículo de inversión, contaba hasta la semana pasada con un 14% prestado a terceros a través de instrumentos financieros. Distintas fuentes del mercado sospechaban entonces que este porcentaje estaba en manos de otros actores como Goldman Sachs quien, a su vez, "estaría prestando este capital a los bajistas".
Si el día 19 de octubre existían hasta 16 grandes hedge funds apostados en corto sobre el capital de Dia, esta cifra se redujo a nueve a comienzos de semana y ayer ya cayeron hasta las ocho actuales, entre los que suman el 6,78 por ciento del capital. De hecho, de los ocho la mitad de ellos -Capital Fund Management, WorldQuant, Citadel Advisors y AQR- notificó el jueves una rebaja en su peso a corto dentro de la compañía.