La subida de los costes productivos y, especialmente, de los precios de la energía han llevado a los fabricantes de vidrio a una situación extrema en sus cuentas de resultados. Así, Vidrala ha sucumbido en el primer trimestre de este año, con un beneficio que se ha reducido en un 97,7%.
Por esta razón, ha decidido acelerar la ejecución de proyectos renovables para reducir su factura energética.
La actividad de la industria del vidrio es intensiva en consumo de energía y, además, sus hornos trabajan en continuo sin posibilidad de paradas selectivas como en sectores como el siderúrgico. "El proceso de fabricación no se puede parar, incluso produciendo a pérdidas. Consumimos la misma energía todos los días del año", señalan desde Vidrala.
Escalada del coste
Su consumo es un 20% electricidad y un 80% gas. Hace un año, el gas representaba un 20% del coste de la compañía alavesa, en torno a 15-20 euros el MW. Desde entonces la escalada ha sido continua, hasta situarse en 300 euros el MW. el día que Rusia comenzó la invasión a Ucrania.
A esta crítica situación se une la amenaza del presidente ruso de recortes de suministro a Europa, lo que encarecerá los precios de otros proveedores como Estados Unidos y Argelia.
En este contexto, Vidrala ha diseñado un plan para acelerar la transición energética que incluye el desarrollo de proyectos renovables, de recuperación de calor y eficiencia en los procesos, entre otros. De esta manera, logrará reducir su factura de energía y su dependencia del gas.
Cuenta a su favor el fabricante de vidrio alavés con una demanda que no deja de crecer. Esto anima a la compañía a mantener las inversiones previstas para mejorar su competitividad y capacidad productiva de forma más sostenible y rentable. También a seguir apostando por diversificar su negocio hacia el suministro de servicios.
Vidrala ejecutará una estrategia inversora de 1.000 millones de euros durante el periodo 2022-2027 ligadas a la sostenibilidad. "La mitad es inversión expansiva y de diversificación de negocio y unos 150 millones se destinarán a potenciar otras fuentes de generación de energía", explican desde la compañía.
En estos momentos tiene en marcha un proyecto fotovoltaico en terrenos en propiedad, cerca de su fábrica de Caudete (Albacete), que ampliará en el futuro. El siguiente paso lo dará en Portugal, donde concentra el 50% de su capacidad productiva, con dos instalaciones solares y, más adelante, en Italia. "Se pondrán en marcha de cinco a diez plantas fotovoltaicas con una capacidad unitaria de 7 a 10 MW. Son instalaciones de autoconsumo, pero de gran escala y en el futuro se valorará, si sobra energía, la venta a la red", confirma el fabricante.
Para su implantación en Reino Unido, Vidrala proyecta la generación eólica, con plantas en Manchester e Irlanda de dos-tres molinos de viento cada una.
Recuperación de calor
También en Reino Unido, en la fábrica de Manchester -donde tiene una instalación de embotellado- se realizará una planta de recuperación de calor para generación eléctrica térmica.
La tecnología del hidrógeno verde será otra de las grandes apuestas de Vidrala. El fabricante está analizando tres zonas para su desarrollo: Elton (Reino Unido), Llodio (España) y Marinha Grande (Portugal), donde las instituciones promueven su crecimiento. A futuro se contempla poner plantas electrolizadoras en sus fábricas.
Además, el grupo vidriero quiere verticalizar su negocio entrando en actividades de reciclado de vidrio y logísticas. En el primer caso, invertirá en nuevas tecnologías de recuperación, sobre todo ópticas, para el aprovechamiento total del vidrio de vertedero y contenedores. "Invertiremos en instalaciones de tratamiento de vidrio en asociación con empresas del sector del vidrio reciclado en Portugal, Reino Unido e Italia", comenta Vidrala.
En logística, Vidrala incrementará su flota propia de camiones, actualmente tiene un centenar, con el objetivo de mejorar el servicio al cliente y asegurar el suministro al cliente, como ha hecho en la última huelga de transporte.