
Ingenostrum, empresa especializada en desarrollo de proyectos de generación de energía renovable a gran escala, ha logra superar la cifra de 1.000 MWh (1 GWh) en proyectos de almacenamiento eléctrico con baterías (BESS) en España a comienzos de este 2022. La compañía resalta este hecho como "un gran hito", y supone el "despegue definitivo", a gran escala, de estas tecnologías en nuestro país, resaltan.
Para hacernos una idea de la magnitud, hasta ahora, los proyectos más relevantes en España rondaban 12 MWh de capacidad y el más grande instalado en Francia (promovido por RTE) es, actualmente, de 61 MWh.
La mayoría de esta capacidad de almacenamiento se realizará en 13 proyectos en Extremadura apoyando claramente la apuesta de los gobiernos nacional y regional por la elección de la ubicación del CNIAE en Cáceres, lugar de nacimiento del fundador y CEO de Ingenostrum, Santiago Rodríguez.
Rodríguez asegura que "al avanzar en la transición energética y en la descarbonización de la economía de la UE, los sistemas de almacenamiento eléctricos desempeñarán un papel fundamental en un sistema energético basado en energías renovables".
En este sentido, el CEO de la compañía asegura que al proporcionar flexibilidad y servicios de equilibrio rápido, las tecnologías de almacenamiento serán capaces de generar unas condiciones que "son vitales", dice Rodríguez, para maximizar la integración de una alta producción de fuentes de energía renovable variable, así como la integración de la red de transporte eléctrico.
Al mismo tiempo Santiago Rodríguez señala que la gran apuesta de Ingenostrum para 2022 es "avanzar en la prospección de los sistemas de almacenamiento termoeléctricos síncronos para apoyar una mayor capacidad de almacenamiento renovable".
En este sentido, el directivo apunta que España "es líder mundial en sistemas de almacenamiento eléctrico con sales fundidas" y reitera que sólo falta avanzar en que el sistema de generación de calor pueda ser conseguido con pura electricidad procedente de energías renovables.
Desde Ingenostrum señalan que quieren participar con el CNIAE en todas las iniciativas que puedan ayudar al salto tecnológico que necesita Europa, no sólo para seguir siendo líderes mundiales en el despliegue tecnológico sino para conseguir la mayor soberanía e independencia energética posibles.
En este sentido recuerdan que 2021 ha sido el año en que "desgraciadamente, hemos podido constatar la debilidad de nuestra dependencia energética, en suministro y precios, del gas natural proveniente de otras regiones del mundo".