
De las tres grandes eléctricas, sólo Iberdrola aumenta su peso en el mercado minorista de la electricidad, alcanzando un 24% de los 29 millones de consumidores en baja tensión del país, mientras que Endesa se mantiene en un 32% y Naturgy retrocede ligeramente hasta el 9%. En conjunto, los comercializadores no tradicionales les siguen comiendo terreno a los verticalmente integrados y alcanzan una cuota del 30%.
Así lo refleja el último Informe de supervisión del mercado minorista de la electricidad, publicado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, con datos correspondientes al 2019. El Regulador destaca que la competencia sigue creciendo en un mercado en el que un 63% de los consumidores están en el mercado libre, frente al 61% registrado un año antes; cerca de 11 millones de consumidores optan por la tarifa regulada, el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC).
La cuota de los tres grandes actores citados se mantiene en el 65% de toda la energía suministrada, con una reducción inferior a medio punto con relación a 2018. Las tres compañías cubren el 81% del consumo doméstico -el 83% un año antes- y el 55% del de las pymes -un 60% un año antes-, mientras que han subido hasta el 58% del sector industrial, frente al 55% de 2018.
El resto del mercado se lo reparten 333 comercializadores activos: 324 en el segmento doméstico, 318 en el de las pymes y 181 en el industrial. Su cuota total creció desde el 28% al 30%, aumentando en las pymes -pasó del 22% al 44%- y en el ámbito doméstico. EDP es la empresa líder de este bloque de empresas, manteniendo un 5% de cuota, seguida por Fortia, que baja del 4% al 3%, y por Acciona y Repsol, que mantienen su 2%.
Los márgenes de las compañías rondan los 10-12 euros por MWh en el segmento de las pymes, en línea con los años anteriores; en el segmento industrial rondan los 5 euros por MWh y en el doméstico de unos 30 euros por MWh, alrededor de un margen neto del 15%, más alto que en años anteriores.
El PVPC: un 17% más barato que el mercado libre
En el caso de los consumidores acogidos al mercado libre, las pymes pagan un 4% más que una año antes, los hogares un 2% más y las industrias, por el contrario, reducen su factura un 1%. En el caso de los pequeños consumidores con PVPC, experimentaron una reducción del 7%, con lo que pagan alrededor de un 17% menos que la media del mercado libre. El margen regulado para el comercializador es de 6 euros por MWh o 15 euros por cliente y año.
Los precios del suministro en España, con relación a la media de la UE, se sitúan por encima de la media en el segmento doméstico, mientras que están por debajo en el segmento industrial, aunque la CNMC explica que esta última referencia hay que tomarla con distancia: no se puede homologar por las compensaciones y gravámenes que cada país adjudica a sus industrias.
La entidad presidida por Cani Fernández llama la atención sobre el crecimiento de los consumidores directos al mercado, cuyas compras representan el 2,4% de la demanda en 2019; apunta que se debe a la regulación, que les "discrimina favorablemente" frente a los comercializadores: no pagan el Fondo Nacional de Eficiencia Energética, ni ciertos impuestos municipales, ni el bono social de la electricidad, y reclama que se ponga fin a esta ventaja.
El bono social, por otro lado, subsidia la energía a 1,2 millones de consumidores, con un descuento del 25% al 40% en el PVPC. El número de beneficiarios ha subido desde el millón de 2018, pero el coste de las ayudas ha bajado hasta los 139 millones en 2019, frente a los 195 millones de un año antes, como resultado de la bajada del PVPC.
También experimenta un crecimiento del 31% de los contratos vinculados a suministro de electricidad 100% renovable, avalada por la CNMC con el sistema europeo de Garantías de Origen, que pasan de 2,9 a 3,8 millones.
Las reclamaciones de los consumidores ascendieron a 936.862 en 2019, lo que equivale a 3,8 por cada 100 clientes, unas 250.000 menos que un año antes. La entidad impuso 11 sanciones por incumplimiento de medidas de protección al consumidor, de los que 10 corresponden a cambios de comercializador sin consentimiento.
Salto en el autoconsumo
Pero donde hay un mayor cambio es en el caso del autoconsumo con excedentes, con un salto del 1.260% en apenas seis meses. La nueva normativa entró en vigor el pasado 1 de marzo y entre esa fecha y el mes de agosto, el autoconsumo con compensación ha pasado de 5 MW -en su mayoría cogeneraciones- a 68 MW, sobre todo de instalaciones fotovoltaicas, que se han multiplicado por cinco.