
El Banco Sabadell ha rebajado a los 56 años la edad de las prejubilaciones, en el marco del ajuste de plantilla que plantea, que afectará a unos 1.800 empleados. La dirección del banco ha mantenido este martes un encuentro con los sindicatos y, según informó CCOO, aceptó rebajar un año la edad de las prejubilaciones, frente a los 57 años planteados en la primera reunión.
Además, CCOO ha solicitado el 80% del salario anual asignado hasta la primera edad de jubilación ordinaria o a los 64 años, sin tope máximo, e incluir el cobro del variable del ejercicio anterior. Según ha trasladado la representación sindical, la propuesta del variable ha sido aceptada.
Al mismo tiempo, el sindicato estima necesario que el convenio especial de la Seguridad Social se mantenga hasta la primera edad de jubilación o a los 64 años, con pago actualizado, en lugar de fijar un máximo de 250.000 euros.
Por otro lado, la dirección del banco ha aceptado que formen parte del proceso voluntario las personas en excedencia por cuidados de descendientes o familiares y el mantenimiento de las condiciones financieras de los empleados que se acojan al ajuste como si estuvieran trabajando en activo, ya sea en cuentas, tarjetas o préstamos en vigor, excepto los que están al 0%.
Asimismo, no realizará cambios con respecto a las aportaciones de cada persona en el Plan de Pensiones de Empleados de Banco Sabadell (PPEBS) hasta la fecha de salida. Respecto a las condiciones de los trabajadores que tienen 63 años o más, CCOO no se ha opuesto a las planteadas por el banco, a los que les propone entre un 10% y un 20% del salario anual asignado en función de la edad. En concreto, para los empleados con edades comprendidas entre los 63 y 64 años, la entidad propone un 20% del salario anual asignado, mientras que para los mayores de 65 años ofrece el 10% del mismo.
Bajas incentivadas
En el caso de las bajas incentivadas, la representación sindical sí que ha solicitado una mejora de la oferta. En este sentido, ha pedido un aumento de la indemnización hasta los 40 días por año trabajado con un tope de dos anualidades, en lugar de los 35 días con un máximo de un año propuesto.
A su vez, CCOO ve conveniente que se estudie la posibilidad de ofrecer una prima lineal a los empleados que se apunten a las bajas incentivadas según antigüedad en el grupo.