
El gigante de la restauración mexicano Alsea, propietario en España de cadenas como Vips, Starbucks, Foster's Hollywood o Cañas y Tapas, además de franquiciado de Burger King y Domino's, ha abierto 250 locales, el 25% de los más de mil que tiene en España, y está estudiando además un plan de ajuste y recortes ante la fuerte caída de sus ventas como consecuencia de la crisis causada por el coronavirus.
La compañía está acusando especialmente el retraso en el proceso de desescalada en Madrid y Barcelona, donde concentra alrededor de la mitad de todo su negocio.
Tras la declaración del Estado de Alarma el pasado 14 de marzo la compañía planteó un Erte (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) para prácticamente toda su plantilla, unos 20.100 trabajadores, el 91% del conjunto. El problema es que dos meses y medio después, la gran mayoría sigue todavía con el empleo suspendido y con atrasos muy significativos en el cobro de la prestación.
Reincorporaciones
Aunque la empresa mantiene públicamente que irá abriendo más locales y reincoporando a la plantilla, en distintos comunicados internos a los que ha tenido acceso este periódico se admite que la apertura de los restaurantes no dependerá ya solo de la seguridad sanitaria y de la fase en la que se encuentre cada territorio, sino también de la evolución de las ventas en otros establecimientos próximos, adviertiendo de que aunque "se tratará de salvar todo el empleo posible" habrá recortes.
Desde los sindicatos aseguran que "la cifra de trabajadores que ha salido del Erte es mínima y apenas se están incorporando dos o tres personas por establecimiento", con lo que la la preocupación en la plantilla va en aumento, especialmente cuando algunos siguen sin cobrar el paro y, según denuncian, "la única solución que nos da la empresa es que pidamos un préstamo".
Desde Alsea insisten, en cualquier caso, en que el proceso de reincorporación de los trabajadores "se intensificará en los próximos días y semanas a medida que sigamos reabriendo más locales y que cada local vaya incrementando su volumen de actividad".
El caso de Alsea no es, sin embargo, una excepción. Y es que la crisis causada por el coronavirus va a pasar una factura muy alta a la hostelería española en su conjunto, un sector que da empleo a más de 1,7 millones de trabajadores. De acuerdo con los datos de una macroencuesta que elaboró la patronal Hostelería de España, el 58,96% de los establecimientos señala que va a tener que realizar un reajuste de plantilla cuando se reanude la actividad.
Y eso, al margen de los posibles cierres. Más del 5% de los bares, restaurantes y cafeterías existentes en España -alrededor de 15.000- se han visto obligado ya a cerrar de forma definitiva y la previsión apunta a que en total serán 40.000, el 15% del total, los que no logren superar la crisis y vayan finalmente a la liquidación del negocio. Ante todo ello, el sector insiste en reclamar al Gobierno un plan de rescate con ayudas para poder reiniciar otras vez la actividad y mantener el empleo.