El consumo de gasóleo se redujo un 68% durante la Semana Santa, con relación a la misma semana de 2019, según los datos de CLH. Se trata de un descenso adicional sobre el 62,2% de bajada registrado la semana anterior, que refleja el cierre de las grandes superficies comerciales por los días festivos de Semana Santa.
CLH señala que las salidas de productos petrolíferos de sus instalaciones entre el 6 y el 12 de abril mantienen el nivel de descenso en comparación con el mismo período del año anterior, como resultado de las medidas extraordinarias implantadas por la crisis el coronavirus: las salidas de gasolinas bajaron un 82%, las de gasóleo un 68% y las de combustible de aviación un 92%.
La empresa presidida por José Luis López de Silanes puntualiza que los datos de la pasada Semana Santa sufren del efecto calendario, porque las vacaciones del año pasado fueron siete días después, y advierte de que, en consecuencia, la semana próxima sucederá lo mismo.
Sin transporte de alimentos
Pero más allá del impacto de un año para otro, es relevante el cambio de la demanda de la semana pasada sobre la anterior: en las dos ha estado vigente la hibernación de la economía, con la suspensión de todas las actividades consideradas no esenciales, pero durante los días festivos se ha reducido considerablemente el transporte de alimentos y otros productos básicos, porque muchos supermercados y grandes superficies han cerrado.
Así, entre el 30 de marzo y el 5 de abril, la salida de gasóleos de los tanques de CLH se había reducido un 62,2%, mientras que entre el 6 y el 12 la bajada fue del 68%, por el menor tránsito de camiones y vehículos pesados; en el caso de las gasolinas, hace dos semanas la demanda descendió un 82,6%, mientras que la semana pasada hasta repuntó ligeramente, con una reducción del 82%.
El consumo de queroseno para la aviación, por su parte, sigue acentuando su derrumbe, pasando del 91,2% al 92% de bajada.
El pasado fin de semana Sanidad permitió el cierre de gasolineras con ventas menores a cinco millones de litros, imponiéndoles servicios mínimos para garantizar el abastecimiento, con vistas a la reactivación de las empresas no consideradas esenciales que ha comenzado hoy.
