
La coalición alemana de centro-izquierda acordó aumentar las inversiones públicas en 12.400 millones de euros para 2024 y facilitar a las empresas la reclamación de subvenciones para trabajadores con jornadas laborales reducidas a fin de contrarrestar los efectos de la epidemia de coronavirus, según un documento presentado este lunes. A esta reducción, las compañías se podrán acoger siempre y cuando afecten a un 10% de su plantilla.
La gran coalición que lidera la canciller Angela Merkel ha decidido articular los mecanismos para facilitar el trabajo a jornada reducida. En una reunión que se prolongó hasta la madrugada, entre las principales medidas aprobadas el gobierno germano, a través de la Oficina Federal de Empleo, asumirá un 60% del sueldo neto de los empleados que estén en empresas que se acojan a la reducción de la jornada laboral por el coronavirus.
Esta se trata de una medida que pretende evitar los despidos masivos ante la preocupación de la cancillería de un desplome de la economía germana. Empresas como Lufthansa ya han anunciado un reducción de su capacidad de hasta un 50% ante la previsible bajada en la demanda de los vuelos.
Además, el ministro de Sanidad ha recomendado cancelar todos los actos con una asistencia superior a 1.000 personas y certámenes como la Feria Internacional de Turismo de Berlín (ITB) o la Feria del Libro de Leipzig ya han sido suspendidos. No así en el fútbol, donde la Bundesliga ha mantenido, hasta ahora, todos los encuentros programados con aforo multitudinario.
Este martes el ministro de Economía se reunirá con los 16 responsables de esta cartera en los estados federales
Este plan de aumentar en más de 12.000 millones las inversiones públicas llega unas horas antes de que el ministro de Economía, Peter Altmaier, se reúna con todos sus homólogos de los 16 estados federales alemanes. En un encuentro programado para este martes, se espera que los responsables económicos del país mantengan las medidas de Merkel y desarrollen aún más el plan para evitar el golpe financiero en Alemania.
Un país que ya ha confirmado más de 1.000 contagios de coronavirus, con un turista de 64 años como el primer muerto. El residente alemán se encontraba de viaje por Egipto cuando se le detectó el virus, consecuencia que ha acabado en su fatal fallecimiento este domingo.