
Elecnor y ACS compiten cara a cara para hacerse con uno de los mayores proyectos eléctricos de Australia. El grupo de infraestructuras y la constructora de Florentino Pérez han entrado en la segunda y última fase (shortlist) del concurso licitado por TransGrid para la construcción de 900 kilómetros de líneas de alta tensión y subestaciones entre Robertstown, en Australia del Sur, y Wagga Wagga, en Nueva Gales del Sur (NWS), por más de 1.200 millones de dólares australianos (742 millones de euros al cambio actual).
La compañía eléctrica de Nueva Gales del Sur espera que las líneas de transporte de energía empiecen a construirse en 2021 y que estén operativas en 2023 como tarde, por lo que la adjudicación final se realizará en los próximos meses, cuando se reciban los permisos finales. En ese momento, TransGrid decidirá si el contrato se lo lleva Elecnor, que se ha presentado en consorcio con la empresa local Seymour Whyte, Cimic (ACS) o Quanta Power Australia, la tercera empresa incluida en la shortlist.
De momento, el Regulador de Energía de Australia (AER) dio el viernes el visto bueno a la viabilidad económica del proyecto impulsado en alianza con ElectraNet, la eléctrica de Australia del Sur (el plan total está valorado en más de 1.500 millones de dólares australianos -unos 942 millones de euros-). Es decir, ha reconocido que los promotores pueden recuperar el coste de la inversión y que la propuesta es la más beneficiosa para los ciudadanos. No en vano, TransGrid asegura que la línea de alta tensión permitirá compartir la energía entre ambas regiones lo que reducirá la tarifa eléctrica doméstica en unos 66 dólares australianos al año.
"Con ElectraNet, TransGrid se compromete a entregar el proyecto al menor costo posible con el mayor beneficio para los consumidores, ya que se reducirá el coste de la energía al por mayor e impulsará las renovables", dijo el consejero delegado de TransGrid, Paul Italiano, en una nota publicada en su página web.
El proyecto arrancará en 2021 y está previsto que finalice en 2023
Así, se espera que la construcción de la línea de alta tensión desbloquee hasta 30 proyectos eólicos y solares por un total de 5,3 GW previstos para Australia del Sur, Nueva Gales del Sur y Victoria. A su vez, el proyecto implicará la creación de 800 puestos de trabajo locales durante la construcción y de 700 empleos en el periodo de explotación.
Luces y sombras en Australia
Elecnor está muy activa en Australia, donde está pujando por varios proyectos, aunque el último gran contrato lo ganó en 2017, cuando se hizo con la construcción del mayor parque fotovoltaico del país austral de ese momento por 133 millones. En los últimos años lo que sí que ha hecho es construir muchas granjas fotovoltaicas en dicho continente.
Por su parte, ACS, que se presenta a través de las constructoras CPB y UGL, de su filial Cimic, ha recibido en las últimas semanas buenas y malas noticias desde Australia. Por un lado, se ha adjudicado contratos de minería en el país por unos 111 millones de euros y otro ferroviario por 546 millones de euros, mientras que, por el otro, se ha tenido que apuntar unas pérdidas de 400 millones de euros tras retirar su filial Cimic el apoyo financiero a su participada en Oriente Medio, BICC. Así, Cimic provisionará la totalidad de los riesgos contraídos con la empresa, lo que llevará a ACS a ganar menos de 1.000 millones.