Empleo

Así nos molesta (y afecta) el despido de un trabajo "tóxico" que odiamos, según una terapeuta

  • Lisa Bobby: "es como terminar una relación de pareja tóxica"
Foto: Dreamstime.

El trabajo es uno de los lugares donde más pasamos el tiempo. A veces, incluso, nos da la sensación de que pasamos más en la empresa que en nuestra propia casa. Es en una oficina, donde podemos sentir una serie de emociones según diferentes factores psicológicos. Estos pueden ser buenos o malos. Sobre estos últimos, en algunos casos, están asociados a un trabajo "tóxico" que incluso podemos llegar a odiar y que nos puede traer serias consecuencias (y molestias) si llega el caso de un despido.

En este contexto, surgen un sinfín de historias "tóxicas" dentro de las empresas, donde los protagonistas son "malos" compañeros o jefes "imposibles". Una publicación de CNBC retrata estos escenarios como, por ejemplo, el de un jefe que usó Slack para insultar a su equipo; o el caso de Adam Neumann, de WeWork, quien realizó reuniones obligatorias los domingos; o los conductores de Amazon, quienes informaron que se saltaron los descansos para ir al baño y orinaron en botellas.

En esta línea, Lisa Bobby, psicóloga laboral y directora de la clínica de Growing Self Counseling & Coaching en Denver, Estados Unidos, señala que la sensación es como "terminar una relación de pareja tóxica".

"Culpa" tras el despido

La experta señala que la razón por la que ser despedido por un jefe que tuvo un impacto negativo en tu vida puede ser "traumático" es porque muchas personas forman una "relación abusiva" con su trabajo.

Y ahí viene la culpa. El desempleado tiene una narrativa que dice: "si yo fuera mejor, no habría hecho un mal trabajo. Fue mi culpa", dice. Es similar a una narrativa que tienen las mujeres o los hombres en una relación abusiva de que: "si fuera mejor, esta persona me trataría como merezco ser tratado", explica la psicóloga.

Si te das cuenta de que extrañas a un jefe al que era imposible complacer o que no respetaba tus límites, asegúrate de "hacer espacio para tus sentimientos", aconseja Bobby.

"No importa lo que esté pasando, cambias la forma en que te sientes al cambiar tu historia", argumenta. "Si te sientes realmente mal por la pérdida de un trabajo es porque estás repitiendo una narrativa hiriente o vergonzosa. Crea una nueva historia que se sienta real, pero que enfatice un giro positivo", agrega la experta.

Por ejemplo, en lugar de decirte a ti mismo "me odiaban", di "a mí tampoco me gustaba ese trabajo y ahora soy libre de encontrar algo mejor", recomienda.

El "gran vacío" de perder un trabajo que odias

En esta línea, Brandon Smith, terapeuta y entrenador ejecutivo conocido como The Workplace Therapist, agrega en el artículo de la CNBC que "algunas profesiones se prestan más a la toxicidad que otras".

Sobre esto último, Bobby señala que "hay entornos en los que se espera que dediques toda tu vida a una profesión". "Los más comunes serían consultas de alta presión, bufetes de abogados de alta presión y banca de inversión. Esas personas son conocidas por dormir en su oficina", explica

Si te despiden de un trabajo que supuso una gran pérdida de tiempo, es posible que te sientas "desorientado", dice Bobby.

"Perder un trabajo que monopolizaba todo tu tiempo deja un gran vacío en tu vida, particularmente si tu significado o autoestima han estado ligados a tu rol profesional", dice la experta. "En estos casos, las personas pueden sentir una inmensa ansiedad, pánico y pérdida y, a veces, regresar a otra situación laboral tóxica en la que están sobrecargados de trabajo para escapar de la crisis existencial", agrega la psicóloga.

Para hacer frente, "tómese este tiempo para invertir en pasatiempos, cuidado personal o relaciones personales", sentencia.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky