La Comisión Europea ha rebajado sus previsiones de crecimiento de la zona euro para 2019 en seis décimas hasta el 1,3% y una décima en 2020 en el 1,6%. Bruselas pronostica que el crecimiento económico continuará, pero de forma más moderada gracias a la mejora del mercado laboral, condiciones de financiación más favorables y una política fiscal expansiva. Sin embargo, reconoce que hay un aumento significativo de incertidumbres que añade riesgo a la baja. España seguirá creciendo por encima de la media europea y la Comisión solo ha rebajado una décima las expectativas de PIB al 2,1%.
España seguirá siendo líder de crecimiento entre las principales economía de Europa pero en un entorno mucha más difícil y con un aumento considerable de las incertidumbres.
La Comisión Europea en sus previsiones de invierno indica que la velocidad crucero que se alcanzó en 2017 ya ha pasado y desde el segundo semestre del año pasado se está produciendo una desaceleración motiva por la caída del comercio mundial, el aumento de la incertidumbre y por las tensiones sociales y política algunos Estados miembros, apuntando a Francia e Italia.
La Comisión reconoce que el arranque de año está siendo malo con "muestras de atonía", aunque los indicadores fundamentales siguen siendo sólidos. El comisario de Economía, Pierre Moscovici, ha indicado que el crecimiento económico se mantendrá, aunque de forma más moderada gracias a la demanda interna de la mayoría de países, la facilidad de crédito y una política presupuestaria ligeramente expansionista.
Tras siete años de crecimiento consecutivo de de crecimiento, la Comisión señala que existe un alto grado de incertidumbre en torno a las perspectivas económicas y las previsiones están sujetas a riesgos a la baja considerables. Como principales preocupaciones apuntan a la ralentización de China, el desenlace del Brexit y, en menor medida, a "las tensiones comerciales que se han reducido en alguna medida".
La previsión para la zona euro contempla que el PIB crezca un 1,3% en 2019 y un 1,6% en 2020, frente a la estimación de otoño del 1,9% en 2019 y del 1,7% en 2020. La previsión de crecimiento del PIB de la UE también se ha revisado a la baja, al 1,5% en 2019 y al 1,7% en 2020 contra el crecimiento esperado anteriormente en el 1,9% en 2019 y del 1,8% en 2020.
Los recortes de mayor envergadura han sido para Italia, Alemania y Países Bajos
Por países los recortes de mayor envergadura han sido para Italia, Alemania y Países Bajos. Especialmente sangrante ha sido el de Italia que ha visto como su potencial crecimiento baja del 1,2% al 0,2% en 2019, una previsión que condena al país a una prolongada de recesión. El país transalpino acumula desde julio del año dos trimestres consecutivos de contracción del PIB, tras meses de enfrentamiento político entre Bruselas y el Gobierno populista de Salvini por la falta de reformas y el incremento del gasto. Italia está siendo advertida por las instituciones internacionales de sus elevados desequilibrios, sobre todo de la elevada deuda que asciende al 130% del PIB. La política del país tampoco ayuda a la economía que ha tenido una modesta recuperación desde la crisis económica.
Por su parte Alemania y Países Bajos han sufrido un tijeretazo de siete décimas a sus expectativas de crecimiento para 2019 hasta el 1,1% y 1,7%. Son los países que más están sufriendo el parón del comercio exterior por su elevada demanda externa. En el escenario de tensión comercial y menor crecimiento de China que maneja Bruselas ambos países serán los que más sufran.
Alemania en el último trimestre del esquivó la recesión técnica por muy poco y los últimos datos económicos disponibles no auguran nada bueno. Hoy se ha conocido que la producción industrial de diciembre cayó al 0,4% y ayer se conoció un fuerte desplome de los pedidos a fábrica. Según los indicadores adelantados, Alemania sufrirá una nueva contracción del PIB en el primer trimestre.
Además de bajar las expectativas de crecimiento, ha tocado la previsiones de inflación bajando desde el 1,8% previsto anteriormente al 1,4% para 2019, lo que supondrá un descenso de los precios respecto a 2018. si se cumplen las previsiones.
La Comisión solo recorta una décima las expectativas para España al 2,1%
Por su parte, la Comisión Europea ha rebajado una décima su previsión de crecimiento económico para España tanto este año como el siguiente (al 2,1% y 1,9%, respectivamente), principalmente por la ralentización registrada en el consumo privado, al tiempo que espera que la creación de empleo se modere en parte por la subida del salario mínimo interprofesional.
Bruselas ha presentado este jueves sus 'previsiones de invierno', en las que también estima que la economía española se expandió un 2,5% en 2018, el mayor incremento entre las grandes economías europeas y por encima de la media de la eurozona (1,9%), pero una décima menos de lo que el Ejecutivo comunitario calculaba en noviembre y cinco décimas menos que en 2017.
El Ejecutivo comunitario explica que en los próximos meses continuará la desaceleración de la economía a medida que el ciclo "madura", pero también advierte de que España se enfrenta a riesgos relacionados principalmente con un entorno global "más débil de lo esperado" y una incertidumbre "creciente" tanto a nivel interno como externo.
A ojos de Bruselas, el principal factor que explica el menor crecimiento económico es la desaceleración del consumo privado, que crecerá en menor medida que la renta disponible. De hecho, la tasa de ahorro de los hogares "rebotará" en 2019 después de haber registrado un "mínimo histórico" el año pasado y seguirá creciendo "levemente" en 2020.
Por otro lado, la Comisión Europea cree que la creación de empleo se "debilitará" en los próximos meses, debido "al esperado impacto amortiguador del incremento en el salario mínimo". No obstante, añade que el crecimiento de la tasa de empleo seguirá reduciendo el nivel de desempleo a lo largo de todo el horizonte temporal.
La contribución del sector exterior seguirá siendo "negativa" pero mejorará este año y pasará a ser neutral en 2020. En este sentido, Bruselas piensa que las exportaciones españolas se acelerarán este año y el próximo a pesar de las tensiones comerciales globales. Las importaciones, según el Ejecutivo comunitario, ampliarán su ralentización en línea con la demanda final. 11:00