
Fuentes del Ministerio de Hacienda señalaron el jueves a este diario que la Junta de Andalucía presidida por Susana Díaz no incurrió en crear duplicidades al contratar funcionarios. La tesis expuesta por el entorno de la que entonces fuera consejera de Hacienda, María Jesús Montero, incide en negar también haber enchufado a dedo a 3.000 empleados en el último año de Gobierno, con un personal duplicado, como han criticado hasta hoy los sindicatos de funcionarios, de manera que, la contabilidad y el registro del personal de la Junta de la etapa de Susana Díaz, con funcionarios, personal laboral, eventuales, etcétera, es real.
Precisamente la duplicidad del personal y de sus funciones constituye una de las principales demandas de las agrupaciones sindicales de funcionarios, arraigadas en Andalucía. En este punto se encuentran entidades como la antigua FAPPE, así como los agentes de Desarrollo Local, cuyo personal "se ha ido pegando con loctite" al Servicio Andaluz de Empleo, comentan desde el CSIF-Andalucía, con la situación paradójica de que, en la comunidad con más paro de España, y una de las que tienen mayor tasa de desempleo de Europa, se encuentra con un servicio en el que estas personas "no pueden hacer determinadas tareas al carecer de la dotación de las potestades administrativas y públicas", apuntan.
Parecidos reproches hay hacia la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (Agapa), y de la que los sindicatos subrayan el personal mezclado, procedente de las agencias de régimen especial con otro tipo de agencias que corresponden a otro inventario de entes.
Descontento arranca también la Universidad de Andalucía Internacional, de la que se dice que tiene más administrativos que profesores, matiza CSIF-A. No en vano, los 3.000 trabajadores que han aflorado del Informe de Impacto de Género de los Presupuestos de 2018, con respecto al último informe de la Junta de Susana Díaz, a fecha de enero de 2019, no están en las Agencias de Régimen Especial -que sí aparecen en el capítulo I-, si no en el Sector Instrumental o Administración Paralela.
La equivalencia entre el número de empleados públicos de la Junta entre los años 2016 y 2018 -con datos de la comunidad autónoma de Andalucía- arrojan bastante luz. De hecho, el número de estos trabajadores se reduce, en consonancia con recortes y con la no reposición de personal, al tiempo que en un año -según el Informe Económico Financiero de los Presupuestos de la Junta de 2018 y los datos de la Portavocía- los empleados del Sector Instrumental crecen en 3.072. O si no crecen -porque ha habido un fallo de contabilidad, como dice Montero-, afloran de repente, tras un ajuste que demuestra que aquí no ha sufrido recortes. Curioso resulta que hasta 2018 no se ha dado información pública del personal del Sector Instrumental.