Raphael Bostic, preseidente de la Reserva Federal de Atlanta, ha asegurado que los tipos de interés pueden moverse "en cualquier dirección", lo que deja la puerta abierta a una reducción del precio del dinero en EEUU, un escenario que era impensable hace tan solo seis meses.
Tras estas declaraciones, el dólar ha iniciado una fuerte depreciación frente a las principales divisas del mundo, entre las que destaca el euro. El descenso contra la divisa única alcanza el 0,7%.
Bostic ha explicado que con la incertidumbre que rodea a la política comercial y la caída de la confianza de empresas y consumidores, la Fed debería dejar que la economía "avanzase durante un tiempo" antes de cualquier decisión de política monetaria".
Las empresas se muestran cada vez más cautas y dubitativas a la hora de invertir, algo que afectará probablemente al crecimiento en 2019, por lo que la Reserva Federal debería ser paciente sobre las alzas de tipos de interés.
Los ejecutivos "están empezando a examinar sus propias estrategias e iniciativas de negocio, anticipando una desaceleración de las condiciones económicas a través de un desapalancamiento o postergando sus planes de expansión". La preocupación por las tensiones comerciales mundiales y cómo podrían resolverse "han dominado las conversaciones".
"Nos acabamos de mover en diciembre (con la última subida de tipos). Deberíamos dejar que la economía avanzase por un tiempo, ver cómo responde a todo esto".
