
El Ministerio de Empleo ha planteado que las tarifas planas y otras reducciones en las cotizaciones a la Seguridad Social, que suman hoy 1.900 millones de euros, sean financiadas por los Presupuestos Generales del Estado (PGE), al ser convertidas en bonificaciones. Hoy son reducciones sin compensación para la Seguridad Social.
De este modo será necesario financiar parte del gasto con cargo a los presupuestos, es decir, obteniendo los ingresos a través de otras vías a las que utiliza tradicionalmente la Seguridad Social, como ha explicado Tomás Burgos, secretario de Estado de la Seguridad Social.
En declaraciones a los medios en el transcurso de la Comisión del Pacto de Toledo, Burgos ha explicado que, de esa manera, se "libera" a la Seguridad Social de una aminoración de ingresos y se pasan todas esas políticas de apoyo al empleo a los Presupuestos General del Estado, que es lo que pide el Pacto de Toledo.
Burgos ha asegurado que ya se está en condiciones de asumir por parte del Estado "todo el compromiso de gasto que suponen las políticas de empleo" y ha confiado en que la medida cuente con el respaldo de la Comisión, y que se ponga en marcha en estos presupuestos.
En una comparecencia hoy en la Comisión del Pacto de Toledo, a petición propia, Báñez ha añadido que el sistema también es "generoso" ya que las nuevas pensiones de jubilación del régimen general de este año pueden que están alcanzando los 1.500 euros de media, un 93% del salario medio en España.
Por su parte, Fatima Báñez, ministra de Empleo, ha dicho que el sistema de pensiones es "amplio, rentable y resistente" y que hoy se pagan "más pensiones que nunca, a más pensionistas y más altas", con un crecimiento medio entre 2011 y 2016 del 6,61%. Aún así, Bañez ha asegurado que las pensiones resistirá a corto y largo plazo.