Economía

Si el Gobierno francés cae el lunes, ¿qué opciones tiene Macron para desbloquear la crisis política?

  • El primer ministro, François Bayrou, se somete a una cuestión de confianza este lunes
  • Su probable derrota conllevará mayor inestabilidad política para el país
  • El presidente tiene diferentes opciones: elecciones, dimisión o nuevo Gobierno
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, en la cumbre franco-alemana de Toulon / Manon Cruz - Reuters.

François Bayrou, primer ministro de Francia, se somete este lunes a una cuestión de confianza ante la Asamblea Nacional que previsiblemente perderá y tumbará el actual Gobierno de la segunda potencia de Europa. La fragmentación política ha bloqueado al Estado galo, que en estos momentos se encuentra ante la disyuntiva de continuar con unas cuentas públicas descontroladas o la necesidad de aprobar un presupuesto nacional con fuertes recortes sociales. Bayrou ha puesto en manos del Parlamento su propio cargo. Es la última bala en la recámara para tratar de salvar su plan financiero para recortar el déficit del Estado y desbloquear las finanzas nacionales.

La Constitución de la V República francesa obliga a que el primer ministro y el resto de su gabinete dimitan si pierden una moción de confianza o de censura. El nuevo escenario sin Bayrou en el Ejecutivo galo aumentará la presión sobre Emmanuel Macron como presidente. El jefe del Estado tiene constitucionalmente tres opciones:

  • Proponer un nuevo primer ministro y conformar un nuevo Gobierno.
  • Disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones legislativas anticipadas.
  • Presentar su dimisión y activar automáticamente elecciones presidenciales.

Cualquiera de ellas suponen un alto coste para Macron y para Francia en un contexto de alta división política. No obstante, el aumento de la prima de riesgo de la deuda pública, el descuadre de las cuentas y la debilidad económica están incrementando la presión internacional y poniendo contra las cuerdas a Francia como modelo de confianza. La decisión que tome el presidente galo tendrá consecuencias que afectarán al resto de la Unión Europea.

Nuevo ministro y día de la marmota

La opción política más continuista para Macron sería nombrar un nuevo primer ministro. En Francia impera un sistema semipresidencialista. El Poder Ejecutivo está dividido entre el presidente, que se ocupa de las relaciones internacionales y la defensa, y el primer ministro, que se encarga de la política doméstica. El Gobierno debe rendir cuentas ante la Asamblea Nacional, que puede destituirlo mediante una moción de censura. Bayrou en su breve mandato desde diciembre ha sufrido ocho votaciones para destituirlo que han fracasado ante la fragmentación política.

Si Macron designa un nuevo Ejecutivo con el Parlamento en contra, es previsible que el escenario de enfrentamiento político continúe. Desde que comenzara la segunda legislatura presidencial de Macron en 2022, ha habido cuatro jefes de Gobierno distintos, con el caso más extremo de Michel Barnier, que duró solo tres meses en el cargo.

Nuevas elecciones legislativas

Esta es la opción que reclama Agrupación Nacional, partido mayoritario en la Cámara y líder de la oposición. A la salida de su reunión con Bayrou, Marine Le Pen y Javier Bardella, líderes de la formación, aseguraron que era la única forma de desbloquear la situación política. "Debe haber es una disolución exprés de la Asamblea Nacional", indicó Le Pen.

La Constitución francesa establece que el presidente de la República puede disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones anticipadas. Si Macron decreta unos nuevos comicios, los franceses volverían a las urnas tan solo un año más tarde de la última cita, que generaron la endiablada aritmética parlamentaria actual. Los sondeos difundidos estos días anticipan que Agrupación Nacional quedaría en cabeza, con un peso similar al de ahora, seguido del Frente Popular.

Este nuevo Parlamento tendría como primera tarea enderezar las cuentas públicas mediante un nuevo presupuesto nacional. El plan fiscal de Bayrou contemplaba un tijeretazo entre recortes sociales y subidas de impuestos de hasta 44.000 millones de euros (1,3% del PIB), con el objetivo de situar el déficit público en el 3% frente al 5,8% actual.

Dimisión de Macron y nuevas presidenciales

La última baza que le queda a Macron, si las otras dos opciones no resultan, es tirar la toalla. En caso de que el jefe del Estado dimitiera, el presidente del Senado asumiría el cargo en funciones y se convocarían elecciones presidenciales automáticamente. La Constitución prohíbe que una persona gobierne más de dos mandatos consecutivos, por lo que Macron no podría presentarse a la reelección.

Durante el actual período de la V República, que se inicia después de la Segunda Guerra Mundial y la descolonización de África y Asia, solo ha habido un caso de renuncia. Charles de Gaulle, el general artífice de la Francia actual, dimitió en 1969 ante las presiones del Mayo del 68 y la pérdida en las urnas del referéndum un año más tarde que abogaba por una profunda reforma constitucional.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky