
El Fondo Monetario Internacional mejora las previsiones fiscales para España en su Monitor Fiscal de abril, publicado este miércoles, pero pide un mayor ajuste el Gobierno para mejorar la eficiencia del gasto. En concreto, sugiere que el fisco español debería eliminar las exenciones fiscales para poder recaudar más sin necesidad de volver a subir los impuestos.
Además de situarla como la economía desarrollada que más crecerá este año, incluso siendo el único país al que mejora las previsiones de avance en dos décimas, la entidad multilateral también hace una corrección de mejora en las finanzas públicas del país con respecto a las emitidas en el anterior Monitor Fiscal de octubre de 2024. A pesar de eso, sus previsiones son menos optimistas que las del Gobierno de Pedro Sánchez.
En concreto, las estimaciones en el décimo mes de 2024 para este ejercicio fiscal eran de un déficit del 2,8% y la corrección en abril de 2025 es de una décima, hasta el 2,7%. Pero lo destacable es que la senda del descubierto en las cuentas públicas tomará una línea descendente, hasta situarse en el 2% en el año 2030. Esto cumpliría con los designios fiscales de Bruselas, que pide que el déficit se sitúe por debajo de la línea del 3%.
En el caso de las previsiones oficiales, el desfase entre ingresos y gastos cerraría este ejercicio en el 2,5% y se iría corrigiendo hasta cerrar 2030 en el 1,2%.
Por su parte, en la tasa de deuda el Fondo está más en la línea con el Gobierno. Prevén que cierre este año todavía en el 100,6%, también una décima menos con respecto a octubre, y auguran que también tomará una senda descendente y ya el próximo año estará por debajo de esa línea hasta rematar la década en el 93% sobre el PIB.
En el caso de las cifras del Plan Fiscal del Gobierno, el pasivo de las cuentas públicas cerraría este año en el 100,7% del PIB y caería hasta el 93% al final de la década.
Las previsiones reflejadas en el Monitor Fiscal de la entidad con sede en Washington D.C. muestran una corrección a la baja de casi medio punto al año en el déficit con respecto a su pronóstico anterior. Esta revisión la explican en su declaración al término de la misión de Artículo IV en España, publicado el pasado 10 de abril. En el documento reconocen la "solidez" del crecimiento que presenta la economía de nuestro país, así como la fortaleza del mercado laboral y la bonanza en la recaudación fiscal.
Sin embargo, lanzó la advertencia de que existen "riesgos fiscales" a medio plazo debido a la "elevada deuda pública", aunque reitera que "la mayoría son a la baja".
Los altos porcentajes que todavía marca el pasivo español hacen que "sea vulnerable a las perturbaciones de crecimiento y los costes de financiación", tal y como advierte también Fedea. Asimismo, llaman a tener en cuenta el incremento del gasto público "relacionado con el envejecimiento de la población", es decir, aquel que tiene que ver con las pensiones, la sanidad y la dependencia. Según la Airef, este podría rondar el 4% del PIB en 2050.
También advierte que el hecho de subir el gasto en Defensa hasta el 2% del PIB "requerirá de mayores recursos".
Preguntada en rueda de prensa por elEconomista.es, la subdirectora del Departamento de Asuntos Fiscales del FMI, Era Dabla-Norris, recomendó que "dada la posición relativamente sólida" de la economía española tanto a nivel fiscal como económico, ahora "hay margen" para avanzar en parte de este ajuste fiscal "ya que los niveles de deuda pública siguen siendo muy elevados", dijo.
Reiteró que, a pesar de que el país consiguió recortar sus niveles de deuda desde la pandemia, "es fundamental para enderezar la deuda en una trayectoria descendente".
Así, el Fondo sugiere llevar a cabo un ajuste fiscal total cercano al 3% del PIB en el periodo comprendido entre 2025 y 2029. Aunque la magnitud es comparable a la planteada por el Ejecutivo, el organismo aboga por una implementación más intensa en los primeros años, lo que facilitaría el cumplimiento de los objetivos establecidos.
Es por eso que los de Kristalina Georgieva sugiere hacer este ajuste fiscal en la base imponible y subir ciertos impuestos como el IVA en los tipos reducidos e impulsar la fiscalidad verde. Asimismo, llama a buscar el ahorro del lado del gasto público.
En materia de pensiones, llaman a aplicar sus recetas básicas de alargar el período de cálculo de las prestaciones, hacer medidas que alarguen la carrera laboral y rediseñar la cláusula de salvaguarda incluida en la reforma de 2011.
Por otro lado, también recomiendan aplicar más disciplina fiscal a las haciendas autonómicas y "abordar la creciente brecha proyectada" entre los gastos en pensiones y las contribuciones a la Seguridad Social.