
La Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) ha enviado una carta a la Generalitat de Cataluña, y a cada uno de los miembros que componen el grupo de expertos que estudia el autodenominado "concierto económico solidario", instándoles a considerar sus críticas sobre el nuevo modelo de financiación pactado entre ERC y el PSC.
Los inspectores piden a los economistas que diseñan "la arquitectura" de la nueva "financiación singular", basada en un esquema de funcionamiento similar al cupo vasco, que atiendan sus objeciones recogidas en el documento Una Administración tributaria de todos.
Desde IHE se pone el foco en el "fraccionamiento" de la Administración tributaria que conllevaría la puesta en marcha del concierto catalán y que dificultaría la persecución del fraude fiscal.
Los trabajadores de Hacienda llegan a decir que no aprecian ningún efecto positivo, "salvo los de tipo político", en el mecanismo consensuado entre socialistas y republicanos.
Como alternativa, proponen la involucración de las comunidades autónomas en la gobernanza de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT). Se trata de un planteamiento parecido al del think tank Fedea, que también se ha mostrado crítico con la financiación singular para Cataluña.
Oposición frontal
IHE lleva meses oponiéndose frontalmente a la propuesta de reforma del Govern. En su último congreso, celebrado en octubre en Córdoba, la asociación avanzó que recurriría a los tribunales para frenar la puesta en marcha del modelo. También alertó contra los intentos de absorber a los inspectores de Hacienda, de adscripción estatal, por parte de la Generalitat, que necesita aumentar la dotación de la Agencia Tributaria autonómica si pretende gestionar el 100% de los impuestos en Cataluña.