La vicepresidenta primera, María Jesús Montero, se agarra a la literalidad del pacto firmado entre PSC y ERC sobre la finalidad singular de Cataluña, y descarta definirlo como concierto fiscal, durante su comparecencia en el Senado. "Es un acuerdo solidario que profundiza en el federalismo", defendió la ministra de Hacienda, que recordó que la propuesta es extensible a otros territorios y que el Gobierno ha puesto sobre la mesa un mecanismo para devolver la autonomía financiera de las CCAA, a través del sistema de quitas de deuda autonómica con el Estado a través del FLA. La comparecencia de Montero -no obstante- ha estado protagonizada por su constante liza con el PP. "¿Cuál es la propuesta del PP?", ha interpelado Montero, que ha instado a los de Feijóo a presentar una propuesta común, "esto de entrar en una carrera fiscal a la baja y pedir más al Estado porque no les llega, se llama populismo fiscal y deslealtad institucional", añadió.
El choque con el Partido Popular ha sido permanente. "Creen que con esto podrían rascar algún voto, pero la legislatura se les va a hacer larga, y están nerviosos porque no lo han asumido", reprobó al grupo popular la número dos de Pedro Sánchez. "Si lo acordado no es un concierto económico, o una reforma de la financiación autonómica, ¿qué es?", reprochó el senador popular, Gerardo Camps, durante su réplica, en la que acusó a la titular de Hacienda de "vender la igualdad de todos los españoles a los independentistas catalanes" para mantenerse en el Ejecutivo. "No se engañen", respondió la ministra, que recordó que en bajo la presidencia de Sánchez las autonomías han recibido 300.000 millones de euros que en los siete años anteriores de gobierno popular.
Junts exige saber si hay concierto económico
Montero trató de hacer malabares para evitar desbaratar el frágil equilibrio parlamentario sobre el que se sostiene el Gobierno en el Congreso, y dedicó buena parte de su discurso a confrontar con el Partido Popular. Aun así, Junts, no dejó escapar su oportunidad para forzar a la vicepresidenta a poner nombre al acuerdo. "¿Concierto económico para Cataluña si o no?, ¿saldrá Cataluña del régimen común, si o no?, ¿quién es el insensato que sin Junts cree que van a salir de esta?", le preguntó el senador postconvergente, Eduard Pujol Bonell, que recordó al PSOE que si no cumplen, "game over, hasta aquí", en relación a la presentación del proyecto de Presupuestos que Montero tiene previsto elevar al Congreso en las próximas semana. "El acuerdo no colmata sus aspiraciones de máximos, tampoco las de ERC; pero, ¿por qué demonizar el acuerdo?, ¿por que lo ha firmado otro grupo?" replicó Montero.
La respuesta a Junts llegó también desde la bancada de ERC, "dejemos de debatir sobre el contenido de un acuerdo que es claro y publico, y pongámonos a trabajar", apuntó Sara Bailac, alineada hoy con la vicepresidenta primera. La senadora republicana reprochó al PP sus críticas al acuerdo y recordó que el programa electoral con el que la popular, Alicia Sánchez, se presentó a las elecciones catalanes de 2012, incluía parte del pacto alcanzado entre el PSC y ERC. "Ustedes proponían que el modelo de financiación singular para Cataluña tendría que tener como objetivo la recaudación, gestión y liquidación de la totalidad de los tributos", censuró Bailac, que lanzó un aviso a Moncloa. "Cualquier incumplimiento, dilación o rebaja de los términos, tendrá consecuencias", amenazó. La respuesta de Montero fue clara, "vamos a cumplir el acuerdo al 100%".
No obstante, la mayoría de los grupos reprocharon a Montero la falta de concreción en sus explicaciones sobre el contenido del acuerdo. No solo el PP, también otros, como el PNV, criticaron la ausencia de aclaraciones de la ministra durante su turno inicial. A ello, se han sumado las condenas al sistema actual de financiación autonómica por parte de los partidos nacionalistas. Compromís y el BNG han insistido en la necesidad de adaptar el sistema a "sus necesidades".
Los valencianos recordaron la condición de infrafinanciación de su región y demandaron la aplicación de un fondo de nivelación transitorio que les compense mientras no se renueva el sistema actual. "Se que con su grupo político tenemos un compromiso y vamos a avanzar", respondió la vicepresidente, que aprovechó su réplica al senador de Compromís para anunciar que el Gobierno tiene previsto "duplicar la cuantía" del fondo de compensación que reciben autonomías, como la valenciana.