
El 2026 marca el plazo final del plan de Recuperación de la pandemia. Por lo que los Estados miembro deberán ponerse las pilas para acometer las reformas e inversiones comprometidas con Bruselas y recibir la financiación pactada. Y mientras la cuenta atrás insta a acelerar la implementación del plan, el comisario de Economía, Paolo Gentiloni, aboga por reproducir la fórmula de los fondos Next Generation en un nuevo instrumento que permita realizar inversiones.
Ha sido en una conferencia sobre la evaluación de mitad de periodo del Plan de Recuperación, que la Comisión Europea publicó el pasado febrero, que el comisario italiano consideró que el diseño del plan de salida de la pandemia "puede servir de modelo útil para el futuro".
Un futuro en el que las necesidades de financiación para las inversiones estratégicas previstas hasta 2030 requerirán de 650.000 millones de euros anuales para la transición verde y digital, ha explicado el comisario italiano. "El Plan de Recuperación contribuirá a asumir tal déficit de inversión, hasta su vencimiento en 2026. Pero, por supuesto, nuestras necesidades de inversión no terminan en 2026. Y han surgido nuevas prioridades, como la defensa o la reconstrucción de Ucrania"
Ante tales necesidades de financiación, Gentiloni ha defendido la creación de un "mecanismo fiscal para toda la UE". A su juicio se trata de un instrumento "crucial para los bienes públicos europeos en ámbitos como la energía, la innovación o la defensa" y ha recordado que fue una sugerencia de las principales instituciones internacionales, como el FMI, la OCDE o el BCE, cuando se ejecutó la reforma de las reglas fiscales.
"No lo incluimos entonces en nuestras propuestas para no complicar aún más un debate ya de por sí difícil. Pero el momento de iniciar este debate es ahora", ha asegurado Gentiloni.
Participó en el evento el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis. En vista de las deficiencias identificadas, el comisario letón anunció que la Comisión Europea explorará fórmulas para que la implementación del Plan de Recuperación sea más sencilla.
"Los comentarios de los Estados miembros nos muestran que hay margen para una mayor flexibilidad y simplificación", ha indicado el letón. Otras áreas identificadas afectan al papel desempeñado las autoridades regionales y locales, así como los interlocutores sociales. "Su grado de participación varía mucho en la UE. Los interlocutores sociales deben desempeñar un papel fundamental en la concepción y aplicación de las reformas del mercado laboral y la política social", ha aseverado Dombrovskis.
En todo caso, el vicepresidente económico de la Comisión Europea ha puesto mandado un mensaje de urgencia para acelerar la ejecución de los planes en los Estados miembro. "A medida que avanza el reloj, debemos seguir adelante con la aplicación: para asegurarnos de que todas las reformas e inversiones se hayan puesto en marcha adecuadamente para cuando llegue la fecha límite".
La presidenta del Banco Europeo de Inversiones puso en valor el "importante impacto en la preservación de la inversión pública en la UE, evitando el daño estructural que sufrimos en la década que siguió a la crisis financiera de 2008". De hecho, el informe anual de inversiones del Grupo BEI muestra que alrededor de la mitad del aumento previsto de la inversión pública entre 2019 y 2025 está relacionado con el programa Next Generation EU.