
Las aseguradoras Mapfre, Caser y Nationale-Nederlanden pugnarán con los grandes bancos para ser gestoras del nuevo fondo público de pensiones para ahorrar en la empresa tras subsanar los requisitos que el Ministerio de Seguridad Social les reclamó el pasado 26 de junio. Se unen así a a los grandes bancos como BBVA, Ibercaja, Santander Pensiones y VidaCaixa, la rama de pensiones de CaixaBank.
Así lo recoge el acta de la mesa única de contratación del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones tras la reunión celebrada ayer. En total hay siete aspirantes para gestionar el fondo de pensiones de empleo promoción pública, que optan a un total de cinco lotes de estos planes que se adjudicarán a cinco gestoras distintas, de tres fondos cada uno (renta fija, renta variable o mixtos). En total se ponen en marcha 15 de estos nuevos vehículos de ahorro a largo plazo al que se podrán adherir planes de pensiones de empleo nuevos o existentes.
En esta última reunión se ha admitido la propuesta de Caser, a quien se reclamó una aclaración sobre la subcontratación de terceros para la gestión o parte del proceso del nuevo fondo público. La aseguradora ha presentado tres lotes con Indexa y dos con Finizens, los gestores automatizados con los que actúa de carcasa para sus planes de empleo y que se caracterizan por las bajas comisiones que aplican.
Una situación similar a la que pidieron detallar en el caso de la holandesa Nationale-Nederlanden, que pretende subcontratar a Goldman Sachs y faltaba por aportar documentación.
En el caso de Mapfre, la aseguradora española pretende recurrir a BNP Paribas como entidad depositaria de los activos; el Ministerio reclamaba la certificación formal al registro de los planes y fondos de pensiones y ahora admite su licitación.
El atractivo de este nuevo plan de pensiones del segundo pilar promovido por la parte pública son las bajas comisiones, cuyo tope está limitado en el 0,3%. Desde el sector bancario, VidaCaixa avanzaba a este medio que las comisiones de su producto serían inferiores a las que marca el pliego de condiciones de contratación. En comparativa, el gran instrumento de ahorro para pensiones por patrimonio acumulado –los planes individuales suman unos 83.000 millones de euros, recoge Inverco- suelen tener comisiones del 1% en adelante.
Las siete gestoras que pasan el corte optan, por tanto, a ser una de las cinco gestoras que aspiran a manejar un patrimonio que el Gobierno espera que alcance los 4.000 millones de euros en un lustro, tal y como informó elEconomista.es.
Los criterios de adjudicación del contrato del nuevo fondo público premian, especialmente, la rentabilidad del aspirante a gestor del fondo de pensiones de empleo de promoción pública durante los últimos cinco años. Cada entidad aspira a sumar hasta 30 puntos (sobre un máximo de 100) por este aspecto.
Sobre la comisión que podrán cobrar las entidades nunca será superior al 0,299% y podrían recibir hasta 28 puntos por este punto. Se presupone que la gran banca tendrá mayor capacidad para ofrecer comisiones más atractivas.