
La Encuesta de Población Activa (EPA) de inicio de año descubre que el paro aumentó en 103.800 personas entre enero y marzo en el que es el mayor aumento del desempleo en ese periodo desde que estallara la pandemia. El 'alivio' para el mercado laboral se esconde tras la cifra de ocupación, que si bien cae, lo hace sólo en 11.100 empleos y consigue su menor descenso en un arranque en 16 años.
La encuesta que publica este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE) coincide con el primer año completo de la reforma laboral y trae una de cal y otra de arena. El dato de ocupación da cierto aire al mercado de trabajo después un cierre de 2022 con el menor ritmo de creación de empleo desde 2013 (sin contar con el año de pandemia), pero la subida del número de parados en más de 100.000 personas confirma la doble realidad.
El primer trimestre es generalmente malo para el empleo porque refleja el fin de la campaña de Navidad. Los datos de esta EPA hay que contextualizarlos, además, con dos circunstancias que marcaron el periodo entre enero y marzo el año pasado: el comienzo de la guerra en Ucrania y la inflación rozando ya el 10%.
La ocupación salva los muebles pese al signo negativo de la cifra. Si se compara con los años previos, la destrucción de empleo fue mucho mayor: en 2022 el numero de ocupados descendió en 100.200 y en 2021, en 137.500. El dato tiene doble lectura. Para el Ministerio de Asuntos Económicos los datos de la EPA confirman "la aceleración del empleo en el primer trimestre del año" y constatan "el cambio estructural y el dinamismo del mercado laboral en España" pero el 'vigor' podría ser consecuencia de un trimestre previo "flojo", según el análisis de Javier Blasco, directo de The Adecco Group Institute en referencia a los 82.000 ocupados que se perdieron de octubre a diciembre.
En cambio, la comparativa del paro no tiene parte positiva: es la mayor subida del paro desde el primer trimestre de 2020 (+121.000) y queda muy por encima de los resultados de 2021 (en el año de la recuperación el número de parados bajó en casi 66.000 personas) y de 2022 (+70.900). Según Blasco, sin embargo, habría margen para que en el segundo trimestre el número de parados sea ligeramente inferior a los tres millones.
La tasa de paro vuelve a su valor más alto en un año
El aumento del paro en 103.800 personas supone un 3,4% más que en el trimestre anterior y sitúa el total de desempleados en 3.127.800 personas, alejando más el objetivo de descender por debajo de los tres millones. Año vista, el paro se ha reducido en 47.000 personas (-1,5%).
La tasa de paro repuntó casi cuatro décimas en el primer trimestre, hasta el 13,26%, 39 centésimas más que al cierre de año y alcanza su valor más alto desde el primer trimestre de 2022.
En el primer trimestre, el paro solo disminuyó en agricultura, con 8.600 desempleados menos. En el resto de actividades aumento, especialmente en servicios (+147.700) pero también construcción (+18.600) y en industria (+12.400).
Analizando por sexo, el desempleo subió más entre las mujeres, con 75.400 nuevas paradas (ya son 1.698.400) mientras que el aumento entre los hombres fue de 28.400, hasta los 1.429.400.
Una buena nueva de la EPA es la caída del paro en 58.300 personas entre los parados de larga duración (más de 12 meses en búsqueda de empleo) y en el colectivo de los que buscan su primer empleo (-8.000 parados).
La tasa de paro juvenil vuelve a tocar el 30%
El número de jóvenes en paro menores de 25 años subió en 10.300 personas en el primer trimestre, lo que supone un 2,2% más que en el trimestre anterior. Así, la cifra total de jóvenes en situación de desempleo se fija en 474.400 a cierre del primer trimestre. En el último año se ha incrementado en 15.300 personas (+3,3%).
La tasa de paro juvenil se sitúa en el 30,03%, casi ocho décimas superior a la del último trimestre del año pasado (29,26%), pero ligeramente inferior a la del primer trimestre de 2022, cuando el desempleo de los jóvenes menores de 25 años alcanzó el 30,18%.
La destrucción de empleos se concentra sobre todo en el sector privado
El respiro en el empleo se desprende de la comparativa con otros años. El descenso del número de ocupados en algo más de 11.000 está por debajo del de otros primeros trimestres. El total de ocupados asciende a 20.452.800 y tampoco logra el objetivo de recuperar el nivel de los 20,5 millones que logró en el tercer trimestre de 2022 por primera vez. En el último año, el empleo ha crecido en 368.000 personas, un 1,83%.
En el trimestre la ocupación aumentó en servicios, con 7.800 ocupados más, y bajó en el resto de sectores. En concreto, la industria perdió 11.200 ocupados, la agricultura, 5.000 y la construcción 2.700. En el marco público-privado, la destrucción de empleo anotada en los tres primeros meses del año se concentró especialmente en el sector privado, que recortó 8.800 empleos (-0,05%) mientras en el sector público se perdieron 2.300 puestos (-0,07%).
Al contario de lo que ocurrió con el dato de paro, en el caso del empleo este disminuyó en 52.800 hombres, mientras que aumentó en 41.700 mujeres.
Máximo de ocupados mayores de 55 años
Por franjas de edad, el mayor retroceso trimestral de la ocupación en términos absolutos lo firmó el grupo de 40 a 44 años, colectivo vio destruidos 55.600 empleos. Los de 35 a 39 años perdieron 20.600 puestos de trabajo y los de 16 a 19 años, 16.000. En la franja de 45 a 49 años se destruyeron 12.200 empleos y en la de 20 a 24 años, 500.
La evolución de los mayores de 55 años es totalmente opuesta y marca un máximo histórico. El colectivo contó con 40.500 empleos más y ya suma 4.225.300 trabajadores. También se creó empleo en el primer trimestre en la franja de 50 a 54 años, con 25.700 empleos más (+0,9%); en el grupo de 30 a 34 años, con 15.200 puestos más (+0,7%), y entre los de 25 a 29 años, que sumaron 12.400 empleos (+0,7%).
Aún así, el grupo de edad entre los 50 y los 65 años cuenta es el más afectado por el desempleo, con casi un millón de parados. De los 20 a los 35 años la cifra de personas sin empleo supera el millón y en el de 35 a 66 suma casi 660.000.
Los autónomos, por su parte, aumentaron en 12.100 (+0,4%) hasta un total de 3.098.900 personas. El avance trimestral sigue sin compensar la pérdida acumulada en el año: desde el primer trimestre de 2022 el colectivo de trabajadores por cuenta propia ha caído en 43.400 (-1,4%).
Otra arista que deja la EPA es el análisis por tipo de jornada. El número de ocupados a tiempo completo se redujo en 34.700 personas hasta marzo (-0,2%), mientras que los asalariados a tiempo parcial se incrementaron en 23.600 (+0,8%), hasta sumar 2,8 millones de personas.
La población activa (personas que trabajan o están disponibles para hacerlo) aumentó en 92.700, hasta 23.580.500. La tasa de actividad sube tres centésimas y se sitúa en el 58,55%. En el último año la población activa se ha incrementado en 321.100 personas.
Récord de asalariados con contrato indefinido
La batalla contra la temporalidad sigue avanzando. La EPA indica que el número de asalariados se redujo en el primer trimestre en 23.200 personas (-0,1%), concentrándose todo el ajuste en el empleo temporal (-117.000). Los asalariados con contrato indefinido, por contra, aumentaron entre enero y marzo en 93.800 (+0,66%), hasta superar los 14,35 millones y marcar un nuevo máximo histórico.
Según los datos aportados por el INE, la tasa de temporalidad retrocedió seis décimas, hasta el 17,28%.
Los hogares con todos los miembros en paro, en máximos desde septiembre de 2021
Del dato de desempleo se desgrana que el número de hogares con todos sus miembros en paro subieron en 7.800 (+0,7%) en el primer trimestre y suman ya 1.055.300, su cifra más elevada desde el tercer trimestre de 2021 y 2.500 más que hace un año.
Entre enero y marzo también descendieron a mínimos de un año los hogares con todos sus miembros ocupados, 43.300 menos (-0,4%), hasta 11.212.100 hogares. La comparativa anual aquí es más benévola: en los últimos doce meses, estas familias se han incrementado en 162.400 (+1,5%).
Desde el punto de vista de la población activa, los hogares con al menos un miembro activo subieron en 36.000 en el primer trimestre (+0,2%), hasta los 13,88 millones, mientras que en el último año aumentaron en 132.300 (+0,96%). Los hogares en los que no hay ningún activo subieron en 44.200 entre enero y marzo (+0,8%), hasta los 5,39 millones. En el último año, estos hogares se han incrementado en 109.100 (+2%).
Por último, la situación de los 'ni-nis'. Al finalizar el primer trimestre había 908.400 jóvenes de 16 a 29 años que ni estudian ni trabajan, 2.000 más que un año atrás: El contrapeso a este dato viene del número 'si-sis': el número de jóvenes que estudian y trabajan ha subido en 38.600 desde el primer trimestre de 2022 y son ya 968.400.