Enero restó 215.047 afiliados medios y sumó 70.744 desempleados. El mercado laboral ha tenido una cuesta de enero más pronunciada que en 2022, especialmente por el aumento del paro registrado, que supera en 53.571 la subida de 2022, pero resiste en plena desaceleración y aún 'salva' la comparativa con los años prepandemia.
El primer mes del año suele ser malo para el empleo como consecuencia del fin de la campaña navideña. El total de afiliados medios se sitúa en 20.081.224, 454.063 afiliados más que hace un año y la cifra más alta en la serie histórica para un mes de enero, apuntan desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. El retroceso propio del primer mes del año ha sido del 1,06%, una caída inferior a la de los eneros de 2021 (-1,15%, o 218.953 afiliados menos), 2020 (-1,26% o -244.044) y 2019 (-1,08%) y ligeramente por encima de la de 2022 (-1%), cuando se destruyeron 197.750 empleos.
El dato de afiliación es el primero con el nuevo sistema de recuento implementado por la cartera que dirige el ministro José Luis Escrivá y que modula la serie desestacionalizada. Según esta medición, que filtra las series de estas fluctuaciones estacionales y de efectos de calendario, la Seguridad Social sumó 57.726 afiliados en el último mes, acercándose a los 20,3 millones de afiliados (20.298.620). Este incremento supera "ampliamente" la variación promedio desestacionalizada de los últimos tres meses (+19.922 cotizantes).
Mujeres y hostelería cargan con el mayor peso de la caída de la afiliación
La bajada mensual de afiliados medios en enero se notó más entre las mujeres, que perdieron en el mes 116.322 cotizantes respecto a diciembre (-1,2%), que en el empleo masculino, que cayó en 98.725 cotizantes (-0,9%). Los datos actualizados este jueves indican que la cifra de mujeres trabajadoras pierde el máximo histórico de 9,55 millones de ocupadas que alcanzó a cierre de 2022 para situarse en 9.442.857 afiliadas; el número de varones ocupados finalizó el primer mes del año en 10.638.367 cotizantes.
La mayoría de afiliados se restaron del Régimen General, el más numeroso del sistema. En total perdió 192.515 cotizantes medios en enero (-1,1%) para situar el cómputo global en 16.713.844 ocupados.
Fue la hostelería la que protagonizó el mayor descenso de la ocupación al perder 43.118 cotizantes respecto a diciembre (-3,3%). Le siguieron las actividades administrativas, con 42.068 empleados menos (-3%), y el comercio, donde la afiliación se contrajo en 39.613 cotizantes (-1,5%).
El Régimen de Autónomos (RETA) restó 20.800 afiliados (-0,6%) y sitúa el total de cotizantes por cuenta propia en 3.307.603.
Desde el Ministerio subrayan que el crecimiento de la afiliación mantiene un "notable dinamismo" en sectores de alto valor añadido, como informática y comunicaciones, que cuenta con un 19,9% más de afiliados que antes de la pandemia, o actividades profesionales, científicas y técnicas, donde la ocupación ha aumentado un 11,5%.
El paro sube cuatro veces más que en enero de 2022
El número de personas desempleadas registradas en las Oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) también sigue el guion propio de enero: el paro registrado nunca ha bajado en el primer mes del año. El aumento es mucho más significativo que el de 2022 (cuatro veces más), cuando el paro registrado aumentó en 17.000 personas, pero la subida sigue por debajo de las anotadas en los años previos a la pandemia, cuando el antiguo INEM recibía entre 81.424 y 100.000 más (en 2008 sumó casi 200.000 desempleados más). En términos desestacionalizados, el paro registrado baja en 12.462 personas.
El total de parados alcanza los 2.908.397. Desde el Ministerio de Trabajo y Economía Social, destacan que es "el menor nivel en un mes de enero en toda la serie histórica" y destacan que con respecto a enero de 2022, el paro registrado ha descendido en 214.681 personas (-6,87%).
El paro solo se redujo en la construcción (-3.111 personas), en el resto de sectores económicos registró subidas, con el mayor ascenso en los servicios (+70.759 parados), seguido de la agricultura (+1.457), el colectivo sin empleo anterior (+1.231 personas) e industria (+408 desempleados.
El paro juvenil sube un 4% pero está en su menor nivel para un enero desde 1997
El paro también avanzó más entre las mujeres. El desempleo femenino subió en 49.937 mujeres (+2,9%), frente a un repunte del paro masculino de 20.807 varones (+1,8%). Trabajo ha destacado que el de este año ha sido el enero con menos mujeres en paro desde 2009, con un total de 1.740.085 desempleadas. El número de hombres en paro totalizó 1.168.312 desempleados al finalizar el primer mes del año.
Por edades, el paro entre los jóvenes menores de 25 años subió casi un 4%, con 7.753 parados más que a cierre de diciembre, mientras que el paro de las personas con 25 años y más se incrementó en 62.991 desempleados (+2,4%). El total de parados menores de 25 años subió hasta un total de 203.504 desempleados, su cifra más baja en un mes de enero dentro de la serie histórica, según ha subrayado el Departamento.
"Los jóvenes vuelven a sufrir el peor impacto, tanto en la evolución del desempleo (+3,96%) como en la caída de la contratación (-8,9%)", señalan desde Adecco.
La temporalidad se sitúa en el mínimo histórico del 15%
El Ministerio de la Seguridad Social explica que los datos de enero reflejan con "más claridad" los efectos positivos que ha tenido la reforma laboral sobre la estabilización del empleo y la mejora de su calidad desde que entró en vigor hace 13 meses. Según indican, el porcentaje de afiliados con contrato temporal retrocedió en el primer mes de año hasta un mínimo histórico del 15%, frente a la media del 30% de antes de la reforma laboral. En el caso de los menores de 30 años, la temporalidad se ha reducido 30 puntos, desde el 53% al 23%.
"El cambio hacia fórmulas más estables de contratación es especialmente notable entre los trabajadores más jóvenes: tres de cada cuatro menores de 30 años tienen ahora un contrato indefinido (77%), frente a uno de cada dos antes de la reforma (47% en el promedio 2017-2021)", subraya el Departamento de Escrivá.
La mayor estabilidad del empleo también se comprueba, indican, en el hecho de que haya aumentado en 52 días la duración media del total de contratos que han causado baja desde la entrada en vigor de la reforma laboral en comparación con las cifras de 2019, antes de la pandemia.
Los contratos registrados en enero mantienen la tendencia hacia la estabilización. Se firmaron 1.200.749, 395.583 (-24,78%) menos que un año atrás pero 66.000 más que en diciembre. Del total, 530.306 (44,16%) fueron indefinidos; son 291.634 (122,19%) más que en enero de 2022.
Por duración de jornada, lo contratos indefinidos se desglosan en 236.443 a tiempo completo, 119.895 a tiempo parcial y 173.968 fijos discontinuos. Respecto a enero de 2022: los primeros han subido 90.707 (62,24%), los segundos se han incrementado en 53.385 (80,27%) y los últimos suben en 147.542 (558,32%).
Los contratos de carácter temporal ascendieron a 670.443 (el 55,84% del total). Pese a que se sitúan sobre la mitad, aquí la tendencia es inversa y caen en 687.217 (-50,62%) con respecto al año anterior. Si se compara con el nivel de 2019, son 1.006.285 menos.