La ausencia de referencias a la política 'cero covid' y la asunción de que el virus se está debilitando han llamado la atención en el último mensaje de la viceministra saliente china Sun Chunlan. Los mercados han reaccionado al alza tras la que ha sido la primera declaración oficial de una "nueva etapa" para China.
"A medida que la variante ómicron se vuelve menos patógena, más personas se vacunan y nuestra experiencia en la prevención del covid se acumula, nuestra lucha contra la pandemia se encuentra en una nueva etapa y conlleva nuevas tareas", indicó tras la reunión de la Comisión Nacional de Salud.
Las palabras no salen de cualquier boca. Sun Chunlan es la 'madre' de la estricta política contra el virus que aplica China desde hace casi tres años. Fue la primera en pisar Wuhan tras detectarse el primer caso y desde entonces hasta ahora no ha dejado de defender que la solución a la transmisión pasaba por mano dura.
El último mensaje de Chunlan llega en plenas protestas insólitas de ciudadanos agotados por años de restricciones que tambalearon los mercados. En el gigante asiático estalló la pandemia y en él permanecen a día de hoy las medidas más severas (confinamientos, cuarentenas, tests masivos...) para contener la propagación del covid-19.
De nuevo, la euforia
En cierta medida, la 'zarina del covid' o 'vieja dama del cierre', como llaman a Chunlan, verbaliza la nueva estrategia que se ha aplicado en los últimos días en Guangzhou tras un rebrote de casos: nada ha tenido que ver la estrategia de contención con la que se aplicó en Shanghái en primavera y que derivó en dos meses de cierre total.
Los medios estatales también han modulado el tono. El Global Times ha publicado recientemente una investigación nacional que demuestra que la letalidad de la variante ómicron (la que más ha azotado al país) ha disminuido. El editorial de la publicación fue en la misma línea, llegando a pedir "no tener demasiado miedo" al virus.
Los rumores sobre la relajación de la politica 'cero covid' han ido y venido en los últimos meses. Sin ir más lejos, la semana pasada se volcó el último jarro de agua fría sobre quienes daban casi por confirmada una retirada paulatina de las restricciones y celebraban el paso como el primero de la recuperación de una economía tocada. La idea de reapertura y 'nueva normalidad' se venía abajo por enésima vez y alejaba el espejismo de los días previos. ¿La razón? Un (otro) repunte de casos masivos que volvía a generar miedo entre las autoridades por un posible colapso sanitario.
Ahora, los mercados vuelven a aferrarse a la esperanza, esta vez más oficial en boca de Chunlan. El optimismo de los inversores se refleja en el yuan y en las acciones que cotizan en los EEUU, ambas registran alzas este jueves. Además, el índice Nasdaq Golden Dragon China subió casi un 10% a cierre de Wall Street, la mayor subida desde el 16 de marzo que llevó la ganancia mensual del índice de referencia a un récord del 42% en noviembre.