
Los bancos centrales no solo tienen el reto de contener la inflación, sino que también deben no empeorarla. Este extremo es posible, según el profesor y premio Nobel en Economía Joseph Stiglitz, si los organismos monetarios suben los tipos de interés de forma demasiado agresiva.
Stiglitz advierte de que la economía global está atravesando una situación no vista hasta la fecha, tras la pandemia del coronavirus y la reactivación después de los meses de parón.
"Subir los tipos de interés no resuelve los problemas de suministro", ha dicho el Nobel en una entrevista en Bloomberg. "De hecho, lo puede empeorar ya que lo que queremos hacer ahora es invertir más en donde se producen los cuellos de botella y, elevar los costes de financiación dificulta esas inversiones", ha explicado.
El también profesor de la Universidad de Columbia duda de la eficacia de la estrategia de los bancos centrales y de que estos den por hecho que contendrán los precios únicamente endureciendo la política monetaria.
Stiglitz pone como ejemplo la economía estadounidense y el poder de mercado, la capacidad de las empresas para influir en los precios y que cobren más a los consumidores sin perder negocio. Eso confirma, según el economista, que la inflación podría elevarse todavía más. El reflejo está en el mercado inmobiliario, en el que los propietarios traspasan los costes de financiación a sus inquilinos y, por tanto, los precios terminan subiendo.
"¿De qué forma una mayor restricción en la oferta monetaria va a solucionar la falta de comida, energía o chips? De ninguna manera", afirma. "No van a ir a la raíz del problema y eso puede empeorar las cosas", zanja.