El Mecanismo RED, el sustituto de los Ertes por Covid diseñado para potenciar la reconversión sectorial mediante la recualificación de los trabajadores, no podía haber tenido peor comienzo. La falta de medios del Servicio Público de Empleo Estatal ha provocado un retraso de casi cuatro meses en el abono de las prestaciones de miles de trabajadores de agencias de viajes, uno de los sectores más afectados por la crisis sanitaria
Una de las principales novedades del Mecanismo RED es que su activación dependía de una decisión directa del Consejo de Ministros.
Así, el Ejecutivo autorizó en su reunión del 29 de marzo la activación del mecanismo para los operadores, tras un proceso de transición que les permitiera realizar la transición. Cabe recordar que, en esos momentos, la tasa de afectados por ERTE en ese sector llegaban al 28%.
A partir de ese momento, las empresas empezaron a remitir la información necesaria para acogerse al programa. Para beneficiarse de la herramienta, junto a la información sobre las reducciones o suspensiones de jornada, debían presentar un plan con acciones de formación para posibilitar la recolocación de los empleados en nuevos puestos dentro de la misma compañía, o en otras. Lo hicieron según los mecanismos habilitados por la legislación.
Denuncias de los trabajadores
Sin embargo, el nuevo sistema específico para comunicar y tramitar la información no estaba disponible y hacía imposible gestionar los pagos, como han descubierto los trabajadores al encontrarse con que en julio siguen sin cobrar las nóminas correspondientes a abril.
Este retraso provocó que el Sindicato Profesional de Viajes (SPV) presentara la pasada semana una queja ante el Defensor del Pueblo, según informó Europa Press. La organización también remitió el escrito ante la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz; la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.
Siete días después de esta denuncia, el 14 de julio, el SEPE ha remitido un correo a las empresas anunciando la disponibilidad "tras varios y complejos trabajos informáticos" en su sede electrónica de la herramienta para el "envío de ficheros de comunicación de actividad de la protección social vinculada al Mecanismo Red".
La sorpresa ha llegado cuando la misma comunicación les insta a reenviar toda la información de abril, mayo y junio, adaptada al nuevo protocolo para que se puedan abonar las nóminas.
Además, pide que "preferiblemente" el envío se haga antes del 20 de julio. Es decir, en un plazo de solo cinco días laborables (aunque en el correo por error se hablaba del 20 de junio), para "garantizar" que las nóminas puedan abonarse el 10 de agosto. Eso sí, la fecha tope de remisión sería el 25 de julio.
Un retraso "inaceptable"
Pero aún existe una complicación adicional, y es que muchas de esas empresas tendrán que rehacer su documentación. Ello se debe a que el nuevo sistema exige rehacer los ficheros sobre suspensiones y reducciones de jornada. "De no ser así, no se generaría ninguna nómina", advierte el SEPE.
Las empresas lamentan el retraso "inaceptable" en esta situación. Especialmente teniendo en cuenta que el organismo dependiente del Ministerio de Trabajo ha tenido siete meses para diseñar la gestión de un sistema creado en diciembre.
La situación recuerda los problemas informáticos sufridos por el SEPE en 2020 y 2021, incluidos dos ciberataques casi consecutivos que colapsaron sus sistemas informáticos. A finales de año el Gobierno anunció un millar de plazas de funcionarios para reforzar su plantilla. De momentos se han cubierto con 926 interinos.