La Comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados ha rechazado, por segunda vez consecutiva, tramitar como Proposición no de Ley el plan de medidas urgentes de ayudas a familias y empresas que defiende el Partido Popular, y en el que se incluye la medida específica de deflactar el IRPF en sus tres primeros tramos hasta un tope de 40.000 euros renta.
El Partido Popular no ha logrado sacar adelante este martes la Proposición de Ley que abunda en una de las patas del Plan de Medidas Urgentes presentada por Alberto Núñez Feijóo a mediados del mes de abril, documento que fue remitido a Moncloa para que el presidente del Gobierno considerase incorporar algunas de las actuaciones fiscales en el decreto presentado por el Gobierno, y aprobado recientemente por el Parlamento, con el apoyo de EH Bildu y el rechazo de ERC.
Por segunda vez consecutiva, el Partido Socialista y sus socios de investidura se han opuesto a admitir la deflactación del IRPF en los tres primeros tramos, para que las rentas medias y bajas se beneficiaran del ajuste a la hora de pagar impuestos.
Es más, el Grupo Socialista en el Congreso ha determinado que la receta económica de Feijóo, propuesta que el dirigente gallego está haciendo llegar a la sociedad civil, no favorece a las rentas por debajo de 12.000 euros, si no, más bien lo contrario, acabaría ayudando a las altas, esgrimen.
Devolver una parte de los impuestos
Este martes, la portavoz de Hacienda del GPP, Carolina España, defendió en la Comisión devolver a las familias una parte de los impuestos que están pagando de más por la alta inflación para que así puedan tener más renta disponible. "Si se deflacta el IRPF el efecto se vería mes a mes porque las retenciones serían menores y las familias notarían su impacto inmediatamente", destaca.
En su intervención, España ha mantenido que "el incremento de precios tiene un perjuicio muy claro para familias, que ven disminuir su poder adquisitivo, y para las empresas, que ven reducir su competitividad". Y así, señala que esta medida está dentro del plan en defensa de las familias y la economía española que mandó el presidente Feijóo a Pedro Sánchez, que también incluye una reducción del gasto estructural del Gobierno, una gestión de los fondos europeos más útil y un paquete reformas estructurales.
La diputada popular ha remarcado que lo que empezó siendo una fuerte subida del precio de la electricidad, que Sánchez negó con su promesa incumplida de que en 2021 se pagaría lo mismo que en 2018, se ha trasladado a la cesta de la compra. En este sentido, indica que la fruta ha subido un 8%, el aceite de oliva un 30% y la pasta un 20%.
Por otra parte, ha criticado el argumento de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, de que la alta recaudación se deba al crecimiento económico, ya que en 2021 la recaudación creció un 15% y el PIB solo lo hizo en un 5,1% y en este primer trimestre la recaudación aumentó un 20% mientras el crecimiento económico tan solo ha sido del 0,3%.
De igual modo, ha reprochado a la vicepresidenta Nadia Calviño que dijera que la alta inflación iba a ser transitoria, como también dijo que el impacto de la Covid-19 en nuestra economía iba a ser poco significativo y transitorio. También rechaza que esta se deba a la guerra de Putin porque en diciembre de 2021 el IPC ya era del 6,5%.