Economía

Estos son los peligros de guardar el dinero bajo el colchón

  • Hay que tenerlo registrado minuciosamente pensando en Hacienda
  • Aunque esté en casa, hay que incluirlo en el Impuesto sobre Patrimonio
  • No está a salvo de eventualidades como robos, incendios, inundaciones...
Foto: Getty.

La pandemia de coronavirus ha puesto sobre el foco la pérdida de importancia del dinero en efectivo, relegado por la cada vez más extensa galería de modalidades de pago por medios telemáticos. Sin embargo, a pesar de este contexto, todavía existen personas que deciden guardar el dinero en efectivo en su hogar a pesar de los riesgos que ello entraña.

Carmen Jover, profesora del departamento de Finanzas, Contabilidad y Control de la Barcelona School of Management ha analizado los peligros puede conllevar la tenencia de efectivo en casa, lo que se conoce también como el dinero 'bajo el colchón'. La experta relata que la fiscalidad de este dinero es su aspecto más conflictivo y el que más problemas puede crear a su poseedor.

La razón es que hay que tener convenientemente registrado este dinero, que para guardar en casa se ha de retirar previamente del banco. Si la Agencia Tributaria nos realiza una inspección por esos movimientos extraños (unas retiradas tan habituales sin gastos aparentes), hemos de poder demostrar que ese dinero retirado simplemente se mantiene en otro sitio. O, dicho de otra forma, que el dinero en casa es el mismo que se ha apartado del banco, explica Jover.

El problema es, precisamente, que la mayoría de los ciudadanos no tienen en cuenta que un acto aparentemente sencillo (quedarse con el dinero en su casa) precisa de esos documentos justificativos para evitarse problemas. Guardar los justificantes de las retiradas es indispensable a tal efecto.

Es conveniente recordar que los bancos tienen la obligación de comunicar a Hacienda cualquier retirada o ingreso de billetes de 500 euros u operaciones a partir de 3.000 euros, límites que marcan esa vigilancia extra por parte de la Agencia Tributaria.

Pero no solo eso: el dinero bajo el colchón está sujeto a una fiscalización que obliga a declararlo de una forma muy concreta. Si el conbtribuyente que lo posee está obligado a declarar en el Impuesto sobre Patrimonio, debe saber que, aunque no esté en un banco, ha de declarar ese dinero. Según la experta, debe reflejarse en el apartado de 'otros bienes', aclarando que es 'dinero en efectivo'.

En caso de no hacerlo, se consideraría un ingreso no declarado que haría al contribuyente" tributar en la base imponible general al tipo marginal" de su comunidad autónoma y que, además, se expusiese a sanciones de Hacienda por no declarar esas cantidades, así como al pago de intereses de demora.

Otros riesgos al guardar el efectivo en casa

Con todo, existen otros riesgos al almacenar el dinero en casa. Uno de ellos es un peligro invisible, el de la inflación. La subida progresiva de los precios hará que ese dinero guardado bajo el colchón pierda valor, es decir, que sirva para adquirir menos bienes que en el momento en el que se depositó en nuestro hogar. La alternativa a esto sería buscar instrumentos de inversión para obtener rentabilidad.

También suponen riesgos los robos en nuestros domicilios, ya que si perdemos ese dinero guardado, nos exponemos a no recuperarlo (puede ser conveniente buscar sitios muy escondidos o incluso contratar un seguro que cubra pérdidas), así como la posibilidad de que se produzcan incendios, inundaciones u otras averías que puedan poner en peligro nuestros ahorros.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky