La prestación contributiva por desempleo, el paro, es la ayuda más importante de las que ofrece el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Es por eso que el organismo, conocedor de su carácter especial, permite la solicitud de esta prestación sin necesidad de certificado digital o Cl@ve.
Debido a que algunas personas pueden tener dificultades para el acceso a esos métodos de acceso, el SEPE contempla la solicitud del paro por otro método aparentemente más sencillo, una presolicitud por la cual, mediante el envío de un formulario, se puede solicitar el paro con nuestra información personal, laboral y bancaria de forma detallada.
Tal y como ha informado en su perfil de la red social Twitter, el acceso al formulario de presolicitud se encuentra en este enlace dentro de la página web del SEPE. El ciudadano ha de elegir el trámite 'Pre-solicitud de prestación individual', introducir su DNI o NIE y clicar en 'Empezar trámite'.
En ese momento, ha de indicar al subtrámite que desea realizar (en este caso, prestación contributiva) y deberá introducir toda la información que le pida el sistema: nombre y apellidos, dirección, fecha de caducidad del DNI, nombre de la madre y del padre registrados en el documento...
El ciudadano también tendrá que aportar un número de cuenta. Esto se debe a que, en caso de que el SEPE acepte el pago de la prestación, la domiciliación del paro se pueda hacer con éxito. Además, hay que introducir el nombre y apellidos (y DNI) del cónyuge o progenitor si hay hijos en común, así como los datos de esos hijos menores de 26, con discapacidad de al menos un 33% o en acogida.
Con todo rellenado, al ciudadano solo le quedará confirmar los datos, enviar la presolicitud y recibir el acuse de recibo por parte del SEPE. El organismo informa de que "efectuará las comprobaciones oportunas y dictará la resolución que proceda" y de que, si fuese necesario, se contactará con el ciudadano "para completar la información o requerir documentación indispensable".
Aunque este método es válido para solicitar la prestación contributiva (el paro), también sirve para pedir otras prestaciones y subsidios, así como para solicitar la baja de la prestación, modificar la domiciliación bancaria o comunicar cambios en la situación del ciudadano que pudiesen conllevar cambios en la duración o cuantía de la prestación.
