
El Banco Central Europeo (BCE) anunciará la reducción de su programa de compras contra la pandemia en diciembre, según el consenso de los analistas consultados por el medio americano CNBC. La mejora de la economía y una inflación al alza serán clave para que el BCE dé este paso a la normalización.
En EEUU, la Reserva Federal ha dejado claro que comenzará a reducir su programa de compras antes de que finalice el año. El presidente Jerome Powell comentó la semana pasada que la economía de EEUU se encuentra en un punto en el que no necesita tanto apoyo monetario, aunque aún no se ha decidido el ritmo al que se reducirán las compras de activos.
También resulta clave aclarar que el tapering (reducción de la compra neta de bonos) no supone, ni mucho menos, una subida oficial de tipos de interés. El BCE y la Fed han dejado claro que el tapering puede comenzar mucho antes de que los tipos de interés oficiales empiecen a subir. Este mensaje podría reforzarlo el BCE en próximos comunicados, según los expertos, dejando claro que aunque los programas de compra de activos pierdan intensidad, la subida del precio del dinero aún podría estar muy lejos.
Y en la zona euro, un anuncio similar podría estar a la vuelta de la esquina. "Mi pensamiento es que probablemente lo harán en diciembre", asegura a la CNBC Gilles Moëc, economista jefe de grupo de AXA Investment Managers.
El BCE se reunirá el 9 de septiembre, pero los analistas creen que el banco central esperará todavía unos meses más antes de anunciar qué hará con sus medidas extraordinarias relacionadas con el covid.
"Creo que quieren darse algo de tiempo y tener nuevas previsiones", explica Moëc, antes de que el consejo de gobierno del BCE tome una decisión final.
El tapering llegará...
Además de tener nuevos pronósticos sobre la mesa, Chiara Zangarelli, economista europea de Nomura, añade que el BCE también querrá ver qué sucede con la pandemia en los próximos meses. Tal y como están las cosas "sería difícil incluso para los moderados" del BCE posponer un anuncio sobre la reducción más allá de diciembre.
El economista jefe del BCE, Philip Lane, también recalcó en una entrevista la semana pasada que "septiembre está muy lejos" de la fecha de finalización actual de su programa de compra de activos contra la pandemia (finaliza oficialmente en marzo), lo que deja entrever que el anuncio sobre la reducción podría llevar algunos meses más.
Los datos preliminares publicados el martes sugirieron que la zona del euro está 'sufriendo' una tasa de inflación más alta de lo esperado, tras alcanzar el 3% anual, la tasa más elevada desde 2011. Desde los países del norte y del centro ya se presiona al BCE para que empiece a normalizar sus políticas ante el miedo a la inflación.
El BCE había admitido que esperaba un aumento de los precios al consumidor este año, aunque debido a factores temporales. El objetivo del banco central es lograr una tasa de inflación general del 2% a medio plazo. Si persistieran las tasas de inflación más altas, esto agregaría presión sobre el BCE para revertir sus estímulos a un ritmo más rápido.
¿Qué ha pasado hasta ahora?
La institución dirigida por Christine Lagarde puso en marcha un nuevo programa de compra de activos a raíz del coronavirus en marzo de 2020 para apoyar a la zona euro. El Programa de compras de emergencia pandémica, conocido como PEPP, finalizará en marzo de 2022 con una dotación total potencial de 1,85 billones de euros.
El programa ha dado al BCE más flexibilidad, concretamente al poder de comprar bonos griegos, que no cumplían los criterios de inversión para ser comprados en otros programas y ha permitido al banco saltarse algunos de los parámetros impuestos en el programa de compras anterior.
"Creo que es un poco prematuro para que las compras del PEPP caigan de forma importante, las compras del PEPP seguirán siendo muy altas durante el cuarto trimestre antes de disminuir en el primer trimestre de 2022", comenta Guillaume Menuet, economista europeo de Citi.
Moëc, de AXA Investment Managers, espera que e PEPP concluya en marzo "pero luego llegará la gran conversación que será qué hacer con el APP". El APP es el programa de compras previo al PEPP, que durante la pandemia ha quedado olvidado.
Cuando la pandemia golpeó la zona euro en marzo de 2020, el BCE también mantuvo su programa de compra de activos, conocido como APP, que tiene un ritmo mensual actual de 20.000 millones de euros. El banco central ha estado utilizando este programa en combinación con PEPP para sostener las condiciones financieras de la zona euro.
Salomon Fiedler, economista de Berenberg, asegura a la CNBC que ese otro programa se prolongará hasta 2023 tras anunciar un incremento de sus compras. Mientras tanto, Zangarelli, de Nomura, cree que es probable que el APP se amplíe en tamaño una vez que PEPP llegue a su fin. Esta experta espera que estos detalles también se den a conocer en la reunión de diciembre.
Lane, del BCE, también asegura la semana pasada que "las condiciones para poner fin a APP no existen". "Independientemente de cuándo termine el PEPP, ese no es el final del papel del BCE en términos de QE. Es por eso que no necesitamos un tiempo de espera para pensar en ello. Por supuesto, tampoco podemos dejarlo para muy tarde. Pero seis meses es mucho tiempo. En otoño, tendremos que resolver muchos problemas relacionados con cómo debería ser 2022 ", explicaba a Reuters.