El líder del Partido Popular, Pablo Casado, expuso la postura su formación política como "partido de Estado" y se desmarcó de la postura del presidente de la Confederación Española de Organizaciones (CEOE), Antonio Garamendi, en torno a los indultos y al trabajo en el Parlamento. La relación entre CEOE y el PP se ha visto empañada por las declaraciones públicas que hizo el presidente de la patronal en el Cercle d'Economia. La postura de Garamendi dejó al representante popular sin el apoyo del líder empresarial ante el independentismo, y Casado se desliga de ese discurso y achaca a Garamendi su cercanía al PSOE.
De igual manera, Casado cercó su trabajo a la vida política. Tras resaltar que él solo se debe a sus "accionistas" que son "los españoles", ha destacado que "millones de españoles se sienten identificados con una alternativa de la normalidad, que es cumplir la ley" y que los políticos se dediquen a "mejorar" la vida de la gente y resolver sus problemas, en vez de crearlos.
Casado declaró que no puede pedir una explicación a Garamendi como representante del diálogo social y CEOE, sino que su tarea es pedir cuentas a sus adversarios políticos. Al ser preguntado expresamente si Antonio Garamendi es un buen presidente de la CEOE, Casado afirmó que él no opina sobre "lo que tiene que hacer" la patronal y ha añadido que tiene "el mayor respeto a todo el mundo".
Pablo Casado asegura que hay muchos españoles que siguen en desacuerdo con la medida de los indultos y dice que la forma más democrática era mostrar su rechazo mediante la recogida de firmas. "Somos un partido de Estado, pero cuando no se hace caso a la Justicia, nos queda al menos la posibilidad de dar un cauce a través de la desafección ciudadana".
Page, único barón contra Sánchez
El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha sido el único barón del PSOE que no ha apoyado la decisión de Pedro Sánchez de indultar a los políticos catalanes condenados por el procés.
El mandatario autonómico castellano-manchego se expresó de forma contraria a los indultos, remarcando que, aunque espera equivocarse, "los independentistas son independentistas y persiguen fines y objetivos que son inviables. No sé en qué momento tendrá que decírsele con claridad desde las instituciones del Estado que esos objetivos son inviables, salvo que se hagan a costa de los derechos del resto de los españoles y de los castellano manchegos".
"Los independentistas persiguen fines y objetivos inviables", dijo García-Page
Por su parte, Vox anunció que está trabajando en la presentación de una querella contra el Consejo de Ministros por la concesión de los indultos. Según precisó la secretaria general del grupo parlamentaria, Macarena Olona, esas querellas se formalizarán si, como pretenden, la Justicia acaba anulando esa medida de gracia.
De igual manera, Vox animó al PP a registrar una moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez tras el "golpe de Estado" que a su juicio ha perpetrado con la concesión con los indultos.
Apoyo desde Euskadi
Aitor Esteban, líder del PNV, se postuló a favor y considera los indultos "un paso necesario y de absoluta justicia". "Son necesarios y de absoluta justicia", añadió. En nombre del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria ha querido mostrar su "absoluto respeto y apoyo a las decisiones que el Gobierno de España pueda adoptar en positivo para la normalización de las relaciones institucionales, políticas y sociales entre las instituciones de Cataluña y del Estado".
En el sentido en que se expresó el Lehendakari, Iñigo Urkullu, el viernes de la semana pasada, ha destacado que los indultos son una medida política encaminada a "impulsar un nuevo marco de diálogo interinstitucional y de entendimiento político, para avanzar en la resolución de un conflicto de carácter y naturaleza política".