
Las negociaciones que impulsa ERC para liderar el próximo gobierno catalán apuntan a nuevas consejerías y a la recomposición de las actuales por redistribución de algunos departamentos, lo que sumado a nuevas áreas para coordinar la llegada de los fondos europeos para la recuperación económica postpandemia, sitúa el número de altos cargos del próximo Ejecutivo autonómico por encima de los 180. Y es que la administración en funciones actual, conformada por Junts per Catalunya y ERC, ya cuenta con 178 cargos de alto rango, contando básicamente secretarios y directores generales, según datos recopilados por TV3.
De hecho, ambas formaciones están actualmente en conversaciones para pactar la organización y reparto de asientos del que debería ser el nuevo Govern, aunque las negociaciones avanzan con mucha lentitud y el reloj para la repetición electoral está en cuenta atrás.
Dicho reparto es clave a nivel táctico para los partidos secesionistas, condenados a entenderse si desean contar con una administración independentista con mayoría suficiente para sacar adelante sus iniciativas -con el apoyo de la CUP-. De hecho, ERC salió ganando en el reparto de la anterior legislatura, pese a que Junts per Catalunya obtuvo mejores resultados, y la formación liderada por Carles Puigdemont no quiere repetir errores en esta ocasión, pese a que ahora es ERC la que tiene mejor registro tras las elecciones del 14 de marzo. En la administración todavía vigente por encontrarse en funciones hasta que no haya presidente, ERC tiene 7 consejerías y 110 altos cargos (el 61,8% del total) y Junts 6 consejerías y 68 altos cargos (38,2%).
Entre las novedades para esta legislatura, ERC pretende crear una Consejería de Igualdad y Feminismos, otra de Acción Climática y otra de Universidades, Investigación y Digitalización, así como comisiones coordinadoras del gobierno de coalición, además de un comisionado sobre los fondos europeos adscrito al departamento de Presidencia, pero Junts también quiere tener control sobre estas ayudas.