
La actividad empresarial en Estados Unidos se ha estabilizado este mes, según las lecturas adelantadas de julio de los índices PMI publicadas este viernes y que elabora la consultora IHS Markit. Sin embargo, pese a lo que anticiparon los analistas, el sector servicios norteamericano sigue contrayéndose.
En concreto, el índice PMI compuesto de actividad total de EEUU se ha situado en 50 puntos, es decir, justo en el nivel que separa la expansión (o crecimiento) de la contracción (o caída).
El mes pasado se situó aún por debajo, en 47,9 puntos, sufriendo las consecuencias de la paralización de la actividad como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
La producción manufacturera sí ha logrado este mes alcanzar los niveles de crecimiento, aunque por la mínima: el PMI manufacturas se ha quedado en los 51,1 puntos, por debajo de los 51,3 anticipados por el consenso de mercado.
Así, el sector terciario norteamericano es el que peor se recupera de la covid-19, ya que este mes continúa cayendo su actividad (49,6 puntos), aunque ha mejorado respecto a junio (47,9 puntos).
"La falta de crecimiento es una decepción"
Con todo, Chris Williamson, economista jefe de IHS Markit, lamenta la "falta de crecimiento" en la actividad empresarial de la mayor economía del mundo. "Es una decepción", asegura.
El experto señala además que "la demanda se tambalea". Asimismo, los costes para las empresas han aumentado, llegando a tocar un máximo de siete años en el sector servicios.
Y aunque las expectativas de las compañías norteamericanas de cara al corto plazo han mejorado, señala, sus previsiones están condicionadas "por la incertidumbre respecto [la evolución del] brote de coronavirus y el entorno político a medida que las elecciones [presidenciales] de noviembre se acercan".