
El cabreo entre los autónomos ante las trabas que genera el decreto aprobado el pasado 21 de abril sobre la moratoria en los pagos de alquileres e hipotecas para los diferentes colectivos, y que obliga a los trabajadores a acreditar el cierre de su negocio para acceder a dicho aplazamiento de la renta inmobiliaria, es de proporciones bíblicas. "Nos están tomando el pelo, llevamos tres semanas pidiendo esto y no hay respuesta", denuncia fuentes de las asociaciones de trabajadores autónomos.
"La suspensión de actividad: certificado expedido por la Agencia Estatal de la Administración Tributaria o el órgano competente de la Comunidad Autónoma, en su caso, sobre la base de la declaración de cese de actividad declarada por el interesado", señala el texto del decreto aprobado por el Ejecutivo como una de las medidas para conservar liquidez entre los profesionales por cuenta propia pero que al tratarse de este documento implican la acreditación del cierre del negocio, no el cese de la actividad.
"Si no tenemos negocio, para qué queremos demorar el alquiler", explican las fuentes consultadas por este diario en las que aseguran que la demanda se viene haciendo constantemente desde que se aprobó el decreto y por la cual miles de autónomos tienen que seguir abonando su cuotas de alquileres o hipotecas de locales comerciales.
En este sentido, será crucial la reunión que mantengan los colectivos representativos de los trabajadores por cuenta propia este martes por la tarde con la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño; la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; y el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en la que volverán a exigir al Ejecutivo la modificación de este extremo legal y en la que desde la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) harán llegar la necesidad de llevar a cabo este cambio legislativo para aliviar la situación de numerosos trabajadores que pese a mantener la actividad con una merma importante de ingresos o acogerse a la prestación extraordinaria con el cese temporal de la actividad continúan pagando las rentas de alquiler o cuotas hipotecarias de los establecimientos con fines comerciales.
Desde la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) también recuerdan una de las demandas de todos las entidades de trabajadores por cuenta propia y que también realizarán en el día de hoy para que la ayuda extraordinaria por cese de actividad se amplíe más allá del estado de alarma, al menos hasta que finalice el proceso de desdescalada a finales del mes de junio. Sobre todo para aquellos colectivos más castigados por la crisis y en los que la recuperación de la actividad será más lenta, como son los negocios asociados a la actividad turística.