
El desplome generalizado de la economía durante estos meses primeros meses del 2020 y provocado por la pandemia del coronavirus ha tocado con fuerza en el sector asegurador. Con los datos del mes de marzo, referentes al primer trimestre, los ingresos de las aseguradoras fueron de 16.699 millones de euros, un 6,83% menos que en el mismo periodo del año pasado.
El sector no ha podido escapar de los efectos de la crisis sanitaria y el confinamiento, lo que reducen sustancialmente el nivel de negocio del sector, según los datos provisionales recabados por Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA) y difundidos por Unespa, que ya ha adelantado que el impacto sobre el negocio será más acusado en los datos del segundo trimestre.
La facturación de las aseguradoras en el ramo de no vida recaudó 10.217 millones de euros. Un dato irreal que proviene de la inercia de crecimiento registrado durante los dos primeros meses del año. Mientras, el ramo de vida contabilizó unos ingresos por primas de 6.482 millones de euros, lo que supone un desplome del 18,46% con respecto a los mismos datos del año anterior.
En el ramo de no vida, la facturación referente a los automóviles ingresó 2.967 millones de euros, lo que supone una bajada del 0,39%; el segmento de la salud 2.454 millones, con un aumento del 6,08%; el de multirriesgos 2.071 millones (+4,56%) y el resto de no vida 2.725 millones (+0,88%).
Estos datos contrastan con las tasas de crecimiento que registraron al cierre de 2019, que ascendieron al 1,52% en el negocio de automóviles y al 3,95% en el resto de no vida. Sobre las cifras de salud inciden el aumento del volumen de asegurados durante 2019 (+3,6%) y el hecho de que los ingresos procedentes de los contratos bianuales con las mutualidades de funcionarios se han computado al arrancar 2020.
En cuanto al ramo de vida, la caída se hizo sentir en el volumen de ahorro gestionado a través de seguros, que dejó de crecer, alcanzando las provisiones técnicas los 191.259 millones al cierre de marzo, un importe un 0,43% inferior a un año antes.
Unespa destaca que, durante la situación excepcional que vive España en estos momentos por el Covid-19, el sector asegurador "continúa prestando servicio a sus clientes y preserva unos niveles de solvencia elevados que superan con creces las exigencias que marca la regulación".