
No ha tenido ni un solo día de vacaciones este verano. Lo único que le ha servido para "desconectar" ha sido un seminario de la UIMP en Santander, pero no se queja. Es una trabajadora incansable que compagina su actividad como presidenta del PSOE con la Vicepresidencia Primera del Senado. Tal vez por eso cuando le preguntas si tiene bloqueada su agenda en las fechas cercanas al 10 de noviembre para una posible cita electoral, sonríe y explica que su planning, también a largo plazo, es imposible para el común de los mortales y niega que su partido quiera nuevas elecciones. Cristina Narbona (Madrid, 1951) es una mujer amable, educada, profundamente de izquierdas y de firmes convicciones que no necesita alzar la voz para hacerse oír. Tiene un discurso que enlaza con la socialdemocracia clásica en cuanto el fortalecimiento de los valores y pone como ejemplo de Gobierno de cooperación el de Portugal. En su presencia es imposible no recordar que es la segunda mujer presidenta del PSOE, ministra de Medio Ambiente con Zapatero, ecologista de larga trayectoria y una de las artífices del documento Por Una Nueva Socialdemocracia, con el que Pedro Sánchez concurrió y ganó las primarias. Para ella, la lealtad siempre ha tenido premio y es una de las mujeres más respetadas y queridas del partido del puño y la rosa. Afirma que un Gobierno de coalición con Unidas Podemos está completamente descartado. Cree que fue un error de Iglesias no aceptar la oferta de una Vicepresidencia y tres Ministerios y que ya no tiene sentido repetirla. Asevera, no obstante, que en caso de acudir de nuevo a las urnas "el nivel de fidelización de los votantes del PSOE" es el más alto y tendrían un buen resultado.
¿El documento de más de 300 medidas dado a conocer por Pedro Sánchez es un nuevo programa electoral o una forma de evitar las elecciones y entenderse con Podemos?
No es un programa electoral, sino un programa de gobierno con mucho detalle. Una oferta que ha sido reposada en agosto en las 24 reuniones que el presidente, miembros del Gobierno y de la dirección del partido han tenido con distintas organizaciones y asociaciones. Un total aproximado de 350 estamentos de la sociedad civil. Por lo tanto, arranca de nuestro programa electoral, pero incorpora medidas y planteamientos en los que coincidimos con Unidas Podemos.
"No se dan las condiciones para que tengamos dentro del Gobierno a personas de un partido que tienen posiciones muy diferentes a las nuestras en asuntos clave"
Cuando ustedes ofrecen a Unidas Podemos entrar en instituciones importantes, aunque no estén en el Gobierno, ¿a qué se refieren?
Primero, lo que ha ofrecido el presidente son mecanismos para garantizar que, si hay un acuerdo programático, ese acuerdo se va a cumplir. Un mecanismo de supervisión y seguimiento, desde una oficina dependiente del Ministerio de Hacienda, una oficina presupuestaria, y comisiones de seguimiento en el Congreso y en el Senado.
Pero, ¿a qué tipo de instituciones del Estado de refieren?
Sánchez mencionó algunas del ámbito judicial, fiscal, energético, etc. Ahí se abre un espacio bastante amplio de organismos donde hay personas que designa el Gobierno, y que, si hubiera una colaboración con Unidas Podemos, podrían recaer en alguien de ese partido.
Vamos, que el Gobierno de coalición con Unidas Podemos se descarta completamente, ¿no?
Un Gobierno de coalición con Unidas Podemos está completamente descartado. Lo descartó Pablo Iglesias en una negociación que todo el mundo vio como terminó. No se dan las condiciones para que tengamos dentro del Gobierno a personas de un partido que, en algunas cuestiones de extraordinaria importancia para España, tienen posiciones muy diferentes a las nuestras.
¿Como qué? ¿Cuáles son esas cuestiones en las que discrepan?
Pues, en concreto, en relación con los partidos independentistas de Cataluña, cuyos postulados, en algunos temas se comparten desde Unidas Podemos y sus distintas confluencias. Nosotros rechazamos completamente un referéndum de autodeterminación que es contrario a la Constitución y optamos por la mejora del Estatuto de Autonomía de Cataluña, y por todas aquellas medidas que permitan recuperar la confianza en esa comunidad.
¿Y qué ha pasado para que esa oferta, que valía en julio, de darle a Podemos una Vicepresidencia y tres Ministerios ya no sirva?
Pues que Podemos consideró que la oferta del Gobierno era insuficiente. En la negociación se puso de manifiesto que ellos pretenden tener un gobierno dentro del Gobierno, segmentar los procesos de decisión, cuando un Gobierno es, ante todo, un órgano colegiado.

Pablo Iglesias dice que él aceptó humillarse y dar un paso a un lado, pero que no va a humillar a sus tres millones de votantes...
Habría que preguntarle a Iglesias si en Portugal se humilla a los votantes de los partidos de izquierda, que están apoyando desde fuera al Partido Socialista. No creo que se pueda hablar de humillación, pero para ellos en julio todo resultaba insuficiente. Y no vamos a volver a esa vía porque tuvo su momento, y ya pasó. La confianza hay que construirla ahora sobre bases diferentes.
¿Fue un error de estrategia de Iglesias no aceptar esa oferta, minimizando la importancia de las competencias de Igualdad o Sanidad?
Decir que el Ministerio de Sanidad no tiene importancia, además de increíble, es un profundo error. Ese Ministerio tiene la Agencia del Medicamento, que incide en los precios de los fármacos, establece las prestaciones del Sistema Nacional de Salud, gestiona el Sistema Nacional de Transplante, las alertas sanitarias, etc. La Sanidad pública es una de las señas de identidad de cualquier partido de izquierdas. Y lo mismo ocurre con el Ministerio de Igualdad. ¿O es que la igualdad ya no es un objetivo de la izquierda? Creer que eso no tiene importancia no se entiende. Fue un error el rechaza de Podemos, pero ahora no se trata de hacernos reproches, sino de mirar hacia adelante sobre la base de esta oferta programática, y confío en que haya una aprobación.
¿Hoy, como presidenta del PSOE, descarta unas elecciones o las contempla, teniendo en cuenta que las encuestas le son favorables?
En el PSOE no queremos repetir las elecciones por muy bien que aparezcamos situados en las encuestas. Lo más importante es que queremos sacar de la parálisis el trabajo del Gobierno y del Parlamento. Queremos que el 10 de noviembre esté ya funcionado el Parlamento para sacar adelante leyes como la de la eutanasia, la reforma laboral y otras donde sabemos que existe un consenso con Unidas Podemos y otros grupos de la Cámara.
Pero ustedes hablan de revertir la reforma laboral, y lo que quiere Podemos es derogarla, y esa es una diferencia sustancial, ¿no?
En nuestra propuesta se recoge derogar los elementos más lesivos de la reforma laboral, y se explicita cuáles son. También es imprescindible avanzar en un nuevo Estatuto de los Trabajadores a partir del diálogo social. Coincidimos también con Podemos en blindar en la Constitución el sistema público de pensiones para garantizar que van mejorando en función del IPC.
"Las 24 reuniones en las que Sánchez ha participado no han sido ni un teatro, ni una escena del sofá"
Podemos pide también un impuesto a la banca, las eléctricas y limitar los precios del alquiler, y eso no es exactamente lo que ustedes apuntan en su documento...
El documento no es cerrado, es una propuesta abierta y se pueden introducir más medidas. Partimos del establecimiento de un tipo mínimo para el Impuesto de Sociedades del 15%, de una reducción del gravamen de Sociedades en el caso de las pymes, de una tasa Google, de un impuesto sobre transacciones financieras y de avances en la fiscalidad. Rechazar participar en el Gobierno que lleve adelante un programa con esas medidas me parecería un enorme error por parte de un partido de izquierdas.
¿Entonces las tasas Tobin y Google son irrenunciables, aunque no sea una opción en otros países europeos?
Sí, la tasa Tobin está en nuestro programa. La tasa a las transacciones financieras estaba ya en la Agenda del Cambio que presentó la ministra Nadia Calviño a Europa hace unos meses. Es un compromiso que defendemos a escala europea, al igual que la tasa Google. En ambos casos sería óptimo que hubiera un impuesto europeo, igual en todos los países, pero estamos decididos a incorporarlo a nuestro sistema fiscal si no hay avances en otras partes. Por cierto, también planteamos la propuesta de un nuevo impuesto sobre el CO2 a nivel europeo, que es una de las fórmulas que ha manejado ya la nueva presidenta, Ursula von der Leyen, en su primer discurso ante el Parlamento Europeo.
¿Se podría llegar al salario mínimo de 1.200 euros? Porque ustedes hablan de una subida hasta el 60% del salario medio, que no es exactamente lo mismo, ¿no?
Con ese 60% del salario medio, que es lo que establece la Carta Social Europea, prácticamente se llega a esa cantidad de 1.200 euros; es una diferencia mínima.
¿Y eso de limitar por ley la subida del alquiler puede hacerse?
Hay una propuesta para limitar el abuso en el mercado de alquileres, interviniendo en lo que son las viviendas vacías y las propiedades de los grandes tenedores inmobiliarios.
¿Qué piensa cuando se acusa al presidente en funciones de estar en campaña permanente, de hacerse fotos con la sociedad civil y no acercarse a los partidos que le pueden facilitar la investidura?
Me parece un error de interpretación. Las 24 reuniones en las que Sánchez ha participado no han sido ni un teatro, ni una escena del sofá, sino una iniciativa extraordinariamente viva e interesante. Despreciar ese contacto es lamentable.
Bueno, admita que hasta el presidente se muestra preocupado por esta parálisis...
Todos esos asuntos y otros muchos requieren de un Gobierno con plena capacidad de actuación. Por ejemplo, la Intervención General del Estado ha dicho que no se puede transferir a las CCAA los recursos que estaban previstos en un Presupuesto no nato. Esa es una de las cuestiones más urgentes. Si hay investidura y un nuevo Gobierno, éste inmediatamente tendrá que ponerse a trabajar haciendo un anticipo a cuenta a las autonomías, que están empezando a tener problemas serios.
¡Y tanto! El agujero que debe el Gobierno a las CCAA es de 8.000 millones...
Claro. El asunto es que las comunidades autónomas están estableciendo sus propios Presupuestos dando por seguros esos recursos que no les han llegado hasta ahora, y aunque me consta que la ministra de Hacienda está haciendo todo lo posible por encontrar una fórmula, de momento no está definida y eso incide en la atención a la Dependencia, la Sanidad pública, la Educación pública, etc.
Usted, que se ocupa de los programas electorales en las campañas, ¿si llega el caso el PSOE está preparado para ir de nuevo a las urnas? Que las encuestas les sean favorables es una gran tentación, ¿no?
A las encuestas hay que darles el valor que tienen, pero hay un dato más que cuantitativo, cualitativo, sobre cómo se mantiene el grado de fidelización de los votantes del PSOE, que es muy alto, el más alto de todos los partidos. Eso nos permite confiar en que si hubiera elecciones podríamos tener unos buenos resultados, pero ese no es nuestro objetivo. Nuestro objetivo es gobernar cuanto antes. Si hay elecciones, hasta que se pueda conformar Gobierno se para el país, no sólo desde el punto de vista legislativo, sino presupuestario, y nosotros no queremos eso.
"Cada vez se entiende menos a Cs. No se entiende que un partido que nació para regenerar la vida pública haya dado apoyo al PP"
¿Qué le parece la negativa del PP a plantearse lo que algunos denominan como una "abstención patriótica", aunque Pedro Sánchez en su día optara por el 'no es no'?
Es verdad que en su día el presidente dijo no es no, pero hay que recordar que Rajoy pudo gobernar gracias a la abstención del PSOE. Y en el PP deberían ser más coherentes con ellos mismos. Saben que, además de la investidura, su abstención facilitaría el entendimiento con nosotros es cuestiones de Estado. Al margen de que no coincidamos en las propuestas programáticas, sacar al país de esta parálisis es responsabilidad de todos.
Quien no está dispuesto ni siquiera a entrevistarse con el presidente es Albert Rivera, lo cual resulta llamativo, teniendo en cuenta que hace bien poco llegaron a pactar un documento de más de 100 medidas...
Me parece sorprendente la actitud de Rivera. No hay precedente en la historia de la democracia de nuestro país, y desconozco si en algún otroe, que un dirigente político se niegue a entrevistarse con el presidente, aunque esté en funciones. Cada vez se entiende menos a Cs. No se entiende que un partido que nació para regenerar la vida pública haya dado apoyo al PP en autonomías donde siguen apareciendo casos de corrupción, y además mire para otro lado, aceptando el apoyo de la ultraderecha. Muchos votantes de Cs deben de estar desconcertados.
Ha habido una imputación a Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes. ¿Eso implica al nuevo PP y significa que siempre habrá una sombra de sospecha sobre ese partido?
La actual presidenta de la Comunidad de Madrid se declaró heredera de la gestión de Cristina Cifuentes y Esperanza Aguirre y fue una estrecha colaboradora de ambas. Por tanto, aquí no ha habido un punto y aparte, sino una línea de continuidad. Es verdad que existe la presunción de inocencia, y hay que dejar a la Justicia que esclarezca los hechos. Pero hay responsabilidades políticas, y por eso el PSOE está pidiendo una comisión de investigación en la Asamblea de Madrid.
Comisión de Investigación, por cierto, que es apoyada por Cs, aunque esté en el Gobierno...
Eso demuestra la esquizofrenia absoluta de Cs, que es lo que tiene tan desconcertados a sus votantes.
¿Es verdad que ustedes han cedido a Bildu la alcaldía de Huarte como pago al apoyo que ellos le dieron a Chivite para ser investida?
Sería importante recordar por qué la derecha gobierna en Pamplona, y también que Bildu estaba en el anterior Gobierno autonómico y ahora no. La derecha ha querido generar una interpretación no justificada de la dependencia de Bildu por parte de María Chivite cosa que no es cierta. Ni Chivite ni el PSOE tienen coincidencia alguna con los postulados de Bildu. Pensar que el PSOE va a someterse a lo que diga Bildu es absurdo y fuera de lógica.
¿Los malos datos del paro y la afiliación constatan que urge una estabilidad política en este país?
Bueno, eso entre otras muchas cosas. Sí hay un inicio de desaceleración en otros países, aunque nuestra economía está resistiendo, es urgente que haya estabilidad política. De cara al futuro inmediato hay muchas leyes que están detenidas: la de cambio climático y transición energética, que provocaría una fuerte inversión pública y privada en torno al cambio del modelo energético, y por tanto una importante creación de puestos de trabajo. Si hay algo fundamental para la economía es la seguridad jurídica. En las expectativas de los inversores es muy importante que un Gobierno tenga por delante una legislatura en la que se haya marcado sus objetivos.