La junta general de accionistas de Ferrovial ha arrojado un dato sorprendente. El 27,5% de los participantes en la asamblea rechazó la operación de venta de la división de servicios. Un porcentaje, en todo caso, minoritario -el apoyo fue del 71,9% y la abstención del 0,57%-, pero que se erige en el punto del orden del día que más votos en contra registró, por encima incluso de la política de remuneración del consejo de administración.
La disconformidad de los inversores no tuvo reflejo, sin embargo, en el turno de intervenciones, puesto que ningún accionista tomó la palabra para cuestionar una operación con la que la compañía espera obtener entre 2.500 millones y 3.000 millones de euros y tras la que pretende profundizar en su apuesta por las infraestructuras de transporte y la movilidad. Según constaba en la propuesta, la venta podrá efectuarse en una o en varios operaciones y podrá afectar a todos los activos de la división o solo a una parte.
En la junta celebrada el pasado 5 de abril, el capital social que participó alcanzó el 66,5%, por lo que el citado 27,5% equivale al 18,3% del accionariado. El rechazo es notable también si se tiene en cuenta el tradicional respaldo que encuentran las decisiones del consejo en las asambleas. No en vano, en un repaso a las votaciones de las juntas de la última década tan solo hubo dos propuetas que recibieron una oposición mayor: las reelecciones de Santiago Bergareche (29,81%) y Juan Arena (27,82%) en 2016.
Precisamente, la renovación de Bergareche en la junta de este año, junto con la de Joaquín Ayuso, fue objeto de polémica por la petición de Leopoldo del Pino, hermano del presidente Rafael del Pino y tenedor del 5,1% de las acciones de la compañía, para que ambos consejeros salieran al poner en duda su independencia, tras 19 años y 16 años, respectivamente, en el consejo. Sin embargo, los accionistas les respaldaron en un 85,7% y un 89,9%, respectivamente.
No en vano, la reelección que tuvo menos apoyos fue la del presidente de Ferrovial. Un 14,99% de los inversores votó en contra y un 8,28% se abstuvo, de manera que se mostró favorable el 76,7%. En la junta de 2016, Rafael del Pino obtuvo el respaldo del 85,4% y en la de 2013 del 90,7%.
